Buenos Aires — Banco de Valores, poseedor de la mitad de los fideicomisos del país, no escapa a la incertidumbre económica y mucho menos financiera que atraviesa la Argentina. Como fiducidario recientemente participó de la conformación del Fideicomiso Financiero “Proyecto V.I.D.A. que financió la construcción y operación de la planta de Laboratorios Richmond para producir localmente la Sputnik V.
Sin embargo, como es el caso de tantas otras entidades bancarias, una de sus principales misiones en estos momentos de turbulencia es la de preservar las utilidades. En el marco del 57° Coloquio IDEA, su presidente, Juan Ignacio Nápoli, anticipó que el banco comenzará con un plan de expansión regional a dos años para contrarrestar los vaivenes locales.
“Estamos esperando la aprobación de Uruguay, y ya estamos evaluando Perú, Colombia y Paraguay”, anticipó a Bloomberg Línea.
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Bloomberg Línea: ¿Cree en un verdadero consenso entre empresarios y el Gobierno?
Juan Ignacio Napoli: Es el camino y es interesante en un momento de complejidad como este, en el que estamos viendo situaciones como: controles de precios, brecha cambiaria, pobreza e inflación alta; todos datos que reflejan una realidad complicada. Es ahí donde el consenso es el camino.
¿Se puede sanear esa brecha?
No se puede acortar porque no hay confianza. Las elecciones de septiembre fueron una elección difícil para el Gobierno y que parece complicadas de cara a noviembre. Hay variables que están un poco fuera de control y aún restan dos años de gobierno. Lo fundamental es inspirar confianza.
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¿Hay posibilidad de salir del cepo cambiario?
Hoy no, no hay reservas y hay conflictos. El Gobierno está haciendo lo que vemos: reforzando los controles y que haya más cepo. Claramente no estoy de acuerdo, pero no veo que sea el momento para salir del cepo.
¿Cómo pueden reaccionar los bancos después de las PASO?
Vemos un escenario de mucha complejidad, donde es difícil vislumbrar el desenlace. Obviamente vemos mucha incertidumbre y desconfianza, y eso genera un escenario complicado.
¿Cómo afectó su negocio esta coyuntura?
Las estructuras de fideicomisos han caído, los fondos han subido, y esto es porque hay muchos pesos. Pero la realidad es que estamos en una situación muy difícil de spreads normales en un país con variables anormales. Por más que estemos bien en ese sentido, hemos tenido una nueva carga impositiva y un ajuste por inflación que hace que los resultados de los bancos sean perjudicados. Nosotros estamos tratando de preservar las utilidades. Hace dos años que no podemos pagar dividendos y estamos con un plan de expansión regional. El objetivo es lograr un equilibrio de ingresos. A pesar de que la mayoría se concentra en Argentina, queremos salir a apoyar los negocios del banco en otros países, porque acá la situación se pone muy difícil.
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