Guatemala — A principios de septiembre del presente año viajó a Guatemala una delegación de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID), a cargo de la directora Laura Elena Carrillo Cubillas con el objetivo de avanzar en la implementación del programa Sembrando Vida.
Lo anterior, es en seguimiento al compromiso que en mayo pasado asumió el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador durante su visita al país junto con el presidente Alejandro Giammattei e incluirlo entre los otros países en donde ya opera como El Salvador y Honduras y, próximamente, en Belice y Cuba.
El propósito es contribuir en el incremento de la productividad de agricultores y sus familias, ofreciéndoles insumos, asesoría y recursos durante seis meses.
Prueba piloto y pre registro
Los departamentos que se han priorizado son aquellos que tienen un alto índice de pobreza y de migración irregular como: El Progreso, Chimaltenango, Totonicapán, San Marcos, Huehuetenango, Quiché, Alta Verapaz, Zacapa, Chiquimula, Jalapa, Jutiapa, Sololá y Suchitepéquez.
Por lo tanto, previo a llegar a los municipios de El Progreso, ya se había realizado una prueba piloto sobre la estrategia del registro de beneficiarios en tres municipios de Chimaltenango, que son parte de los 13 departamentos a donde llegará el programa.
Junto con la delegación mexicana se llevó a cabo el pre registro de beneficiarios en los municipios de San Agustín Acasaguastlán y Guastatoya de El Progreso con 375 posibles candidatos.
Sumados los dos municipios de El Progreso ya se cuentan con cinco de los 55, pero hacen falta 50 para poder alcanzar a 14.000 agricultores beneficiados.
Los agricultores que van a conformar parte de este beneficio son los agricultores que actualmente conforman los Cader de la Dicorer y van a pasar por un proceso de registro biométricos que realiza la Agencia Mexicana de Cooperación.
Biofertilizantes
La meta es poder ayudar a los agricultores a que mejoren sus condiciones de vida a través de una mejor producción agrícola y que esa mejor producción agrícola se traduzca en mejores ingresos y una mejor nutrición.
“Lo que se busca es evitar que los agricultores vean la migración como una alternativa de desarrollo y la puedan encontrar en el país a través de este acompañamiento técnico”, dijo Adonay Cajas, director de la Dirección de Coordinación Regional y Extensionismo Rural (Dicorer) del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (Maga).
El programa incluye un proceso de capacitación para la implementación de fábricas para producir biofertilizantes que se van a desarrollar al menos uno por cada municipio.
“En ese proceso hay que hacer un registro de los agricultores, para lo cual las sedes departamentales con las agencias municipales de extensión rural del Maga estarán apoyando en todo este proceso logístico de convocatoria y acompañamiento para el registro de los agricultores”, afirmó Cajas.
Apoyo económico
El programa cuenta con un presupuesto de US$20 millones (Q155.6 millones) destinados a incentivar la producción de alimentos para el autoconsumo, la comercialización de excedentes y la mejora de las prácticas agrícolas.
La meta es que en ocho meses los agricultores puedan recibir este acompañamiento técnico del proyecto; y dentro de las tres acciones que se van a implementar hay un aporte económico equivalente a mil dólares, el cual se dividirá en cuatro pagos.
Los pagos serán bimensuales equivalentes a US$250 en efectivo, y deberán apartar US$25 como un ahorro, indicó Cajas.
En el caso de los insumos la idea es entregarlos para la próxima temporada, que sería a partir de marzo del próximo año, para que los insumos los tengan de manera oportuna antes de que inicie el ciclo agrícola en el país; la capacitación y asistencia técnica estará a cargo de profesionales que AMEXCID está evaluando para su contratación.
Se espera que en septiembre finalice el registro de los beneficiarios y en octubre del presente año arranque formalmente el proyecto.
Experiencias en otros países
Sembrando Vida beneficia a 10.000 pequeños agricultores, de diez departamentos de El Salvador, quienes, según el gobierno salvadoreño, han mejorado su calidad de vida, mediante ayudas monetarias, más el acompañamiento técnico para la siembra de maíz, hortalizas, árboles frutales y maderables.
El 99% de los beneficiarios reportó un incremento en el autoconsumo de sus productos agrícolas; mientras que el 34% tuvo un impacto positivo en el cuidado del medio ambiente y el 99.1% mejoró las prácticas de cultivo.
Además, el 55 % de campesinos que había pensado migrar se redujo a solo el 0.6 %; un 77% mejoró su alimentación y el 75% percibió un aumento de sus ingresos; en tanto que el 74% mejoró la calidad de vida de la familia y el 54% invirtió en vivienda.
En el caso de Cuba, el gobierno de México destinó US$10 millones para beneficiar a cinco mil productores agrícolas, quienes viven en 17 municipios de las provincias de Artemisa y Mayabeque, en la zona metropolitana de La Habana.