Bogotá — Luego de que Jetsmart anunciara que desistirá en su proceso de intención de compra de Ultra Air en Colombia, esta última aerolínea reiteró que está en aprietos y requiere apoyo del Gobierno Nacional “con el fin de continuar prestando el servicio público esencial de trasporte aéreo de pasajeros”.
Para evitar un caso similar al de Viva Air, que por problemas financieros anunció su cese de operaciones afectando a usuarios y al sector hotelero y de turismo, la Superintendencia de Transporte dijo que le pondrá la lupa a Ultra Air.
En la mañana de este jueves la autoridad dijo que, ante un eventual cese de operaciones, la aerolínea deberá informarle a la Superintendencia “el mecanismo de preservación de los pasivos por la venta anticipada de tiquetes para efectos de garantizar la efectiva medida de cumplimiento del plan de manejo de pasajeros”.
¿Qué pasa con Ultra Air?
Según la Supertransporte, la aerolínea presenta baja liquidez, lo cual dificulta el compromiso con las obligaciones a corto plazo, generando un riesgo de incumplimiento con sus acreedores.
Además indicó que la situación contractual relacionada con las aeronaves dispuestas para la prestación del servicio refleja una posible vulnerabilidad a la capacidad operativa que permita cumplir con su objeto social, así como con las obligaciones a su cargo, principalmente aquellas relacionadas con proveedores y ventas anticipadas de tiquetes.
De acuerdo con Ultra Air, “la situación de la industria aérea es compleja dado los incrementos en los costos del combustible, la tasa de cambio, la inflación y la incertidumbre ante la suspensión de operaciones del operador del 25% del mercado”.
“Seguimos trabajando para obtener nuevos recursos de nuestros inversionistas y banqueros, ya que la salida de JetSmart del acuerdo firmado, puede obligarnos a ajustar la operación, caso en el cual estaremos contactando a nuestros clientes para minimizar los impactos que estos cambios puedan generarles”, añadió la aerolínea en la noche de este miércoles a través de un comunicado.
Por lo anterior, la aerolínea reiteró su “solicitud de apoyo al Gobierno Nacional con el fin de continuar prestando el servicio público esencial de trasporte aéreo de pasajeros”.
¿Qué hará la Supertransporte?
Dada la situación de Ultra Air, la Superintendencia de Transporte tomó las siguientes medidas administrativas:
- Ultra Air deberá implementar un plan de trabajo en donde se detalle un listado desagregado por rutas, el cual deberá incluir la programación de los vuelos comerciales, para cada uno de los 7 días de la semana, donde se identifique la aeronave y el personal de la tripulación para cada una de las frecuencias.
- Deberá informar todos los lunes antes de las 6:00 p.m., por un término de 3 meses, sobre la toma de decisiones de los órganos de administración cuando se presente un riesgo de tipo económico y operacional que afecte la prestación del servicio.
- Deberá informar a la Superintendencia de Transporte, las negociaciones que adelante para su capitalización.
- Deberá implementar acciones necesarias, preventivas o correctivas, relacionadas con el plan de manejo de pasajeros ante un eventual cese y/o suspensión de operaciones.
- Deberá informar a la Superintendencia, el mecanismo de preservación de los pasivos por la venta anticipada de tiquetes para efectos de garantizar la efectiva medida de cumplimiento del plan de manejo de pasajeros, ante un eventual cese y/o suspensión de las operaciones.