Bloomberg — Oi SA, el operador de telecomunicaciones brasileño en dificultades, pospuso del 26 de abril al 22 de mayo la publicación de su balance general para el cuarto trimestre de 2022, según un documento regulatorio.
La empresa, que se encuentra en una segunda quiebra, dijo que su estatus legal y las negociaciones con los acreedores impactaron la preparación de los estados financieros. El operador de telecomunicaciones, sin embargo, publicó información preliminar y no auditada.
Según el documento, la posición de efectivo de la compañía finalizó 2022 en US$638 millones ($3.223 millones de reales).
El EBITDA fue de $320 millones de reales en el cuarto trimestre del año pasado. Para todo el año 2022, el monto fue de $2.148 millones de reales, según datos no auditados.
Los ingresos netos consolidados se ubicaron en 2.618 millones de reales en el último trimestre del año y 12.490 millones de reales para todo 2022. Los datos de ingresos, así como el EBITDA, se refieren solo a la operación brasileña de la compañía.
Oi solicitó protección por bancarrota en un tribunal de Río de Janeiro en febrero después de salir de una de las reestructuraciones de deuda más grandes de la historia de Brasil. La compañía dijo que la solicitud de protegerla de los acreedores era “la medida más apropiada” ya que lidia con una fuerte carga de deuda.
Oi no proporcionó una cifra de deuda total actualizada, pero enumeró alrededor de $29.800 millones de reales en pasivos en ese momento.
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