Bogotá — La movilidad eléctrica avanza en las principales economías de Latinoamérica sin que aún se hayan logrado desmontar barreras que van desde los altos aranceles de importación que encarecen estos vehículos hasta la baja penetración de la infraestructura de carga, entre otros, que impiden acelerar a fondo en la adopción en medio de los planes de transición energética.
Los costos asociados a la carga de un vehículo eléctrico dependen de una multiplicidad de variables que van desde el costo de la energía en cada uno de los mercados, así como el lugar en donde se cargue, el tipo de cargador, entre otros.
En cada modelo de carro eléctrico los precios también se definen en función de la capacidad de energía almacenada, lo que en el caso de los vehículos a combustión se refiere al volumen de su tanque, que está expresado en litros o galones que se convertirán en energía por combustión interna del motor.
“En el caso de los VE, la energía almacenada depende de la capacidad de la batería, la cual se expresa en kWh (Kilovatios hora). Afortunadamente, no hay diferencias entre las unidades eléctricas en el sistema inglés y el internacional”, respondió a una consulta de Bloomberg Línea el experto en movilidad y CEO en el fabricante de equipos para carga Mobility Energy, Martín Gallegos.
Agregó que los vehículos eléctricos actuales pueden almacenar entre 30 y 100 kWh en sus baterías, que son de materiales como litio con algunos otros minerales.
Indicó que en la actualidad se viene investigando y desarrollando baterías con sodio, “que es más abundante y seguramente aumentarán las capacidades y disminuirá en costo en los años por venir”.
Otro factor a considerar en cuanto a los costos es la potencia de cada vehículo, que en el caso de los de combustión está determinada por caballos de potencia o caballos de vapor en unidades inglesas que equivalen a 0,75kW.
Desde Mobilty Energy indicaron que en el caso de los carros eléctricos la potencia de los motores se define en términos de kW y que esta puede oscilar entre 30 y 290 kW según la marca y referencia.
Gallegos también dice que es clave considerar el consumo de energía, que a su vez presenta distintas variables.
Puso el ejemplo de un vehículo totalmente cargado (con 90 kWh en baterías) y con un motor de 90 kW de potencia.
En teoría, “si mantengo el motor girando a la su máxima potencia en el lapso de una hora, la batería se descargaría del 100% al 0%”. Sin embargo, precisó que esto no es así, ya que no se aplica toda la potencia de forma instantánea, dado que depende del acelerador.
Además, durante los descensos y frenadas los motores eléctricos generan energía o “regeneran”, lo cual permite cargar las baterías.
Y por último se tiene el factor de la autonomía, que se define como la capacidad que tiene la batería para recorrer cierto kilometraje o millas con una carga completa.
Sin embargo, complementa Gallegos, “en muchos casos este parámetro no se cumple por diversos factores como la topografía del terreno y los hábitos de manejo del conductor”.
Además, existen otros consumidores de energía que pueden agotar batería y disminuir la autonomía como la calefacción, aire acondicionado y luces, principalmente.
Al tratarse de un mercado emergente, no existe un parámetro definido para analizar los costos de carga en los distintos mercados en regiones como Latinoamérica, como sí lo hay en el caso de los carros a combustión.
Bloomberg Línea consultó a las principales asociaciones del sector automotor en Latinoamérica para conocer los precios promedio de la carga de los carros eléctricos en estos mercados con los parámetros que cada uno de estos mercados.
Aun así, como se explicó anteriormente, esto puede ser relativo en función de las condiciones de cada mercado y particularmente de cada tipo de vehículo.
Brasil
Desde la Federação Nacional da Distribuição de Veículos Automotores (Fenabrave) precisaron que el importe cobrado varía entre R$1,90 y R$2,10 reales/kWh (US$0,3 y US$0,4).
Es decir, se paga entre R$95 (US$18,7) y R$105 (US$20,7) por una recarga completa de un modelo con batería de 50 kWh, como el Peugeot E-208 GT.2.
En tanto, en el caso del mismo modelo, pero con motor a combustión, el precio puede rondar los R$277,44 (US$54,7).
México
De acuerdo a información publicada por la plataforma de gestión de energía Energy5, el valor promedio de operar un carro eléctrico va de US$0,09 y US$0,23 por milla (1,6 kilómetros).
Hasta el año pasado en ese país había más de 1.000 centros de recarga o electrolineras para vehículos híbridos plug-in y eléctricos.
Chile
El presidente de la Cámara de Comercio Automotriz de Chile (Cavem), Martín Bresciani, explicó a Bloomberg Línea que una carga para un recorrido de 200 kilómetros, que calculó en un consumo de 40 kWh, puede costar entre US$9 y US$14.
Esto va a depender del tipo de carga, bien sea domiciliaria de carga lenta o electrolinera pública de carga rápida.
“Los mismos 200 kilómetros en combustible para un vehículo que tiene uso urbano puede significar en Chile US$28 debido al alto precio del combustible y los altos impuestos que se le aplican”, indicó.
Argentina
Cargar un auto eléctrico en Argentina cuesta la novena parte del dinero que demanda un auto naftero para recorrer el mismo kilometraje, de acuerdo un estudio publicado por el Ente Regulador de los Servicios Públicos (ERSEP), que pertenece al Gobierno de Córdoba.
El reporte fue citado en una conversación con Bloomberg Línea con el director general de la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (ACARA), Marcelo Randazzo.
El directivo ejemplificó que si el gasto en los carros a combustible fuera de ARS$10.000 (US$11,24), en el caso de los eléctricos este valor se reduciría a ARS$1.100 (US$1,23) por hacer la misma cantidad de km.
Colombia
De acuerdo a cifras de Enel X, división de energías limpias de Enel-Codensa, la carga de la batería de un carro eléctrico con autonomía de 300 km puede durar más de una semana.
Instalar un punto de carga en casa como los de la red de esa firma puede costar COP$3 millones (US$706,5) en promedio, dependiendo de las condiciones de la ubicación.
“El costo será de acuerdo al tamaño de la batería del carro. Si es de 30kWh (de las baterías más grandes), la energía utilizada en una recarga, equivalente a una tanqueada, sería de COP$19.000 (US$4,4) en estrato 6 y de COP$15.000 (US$3,5) en estrato 4 aproximadamente, para recorrer 250 km”, explica.
Perú
En ese país, el presidente de la Asociación de Emprendedores para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico en el Perú (Aedive), Adolfo Rojas, dijo que recorrer 35 kilómetros con un auto eléctrico cuesta cerca de US$1,3 y con uno convencional a gasolina cerca de US$5,3.
Costa Rica
La directora ejecutiva de la Asociación Costarricense de Movilidad Eléctrica, Silvia Rojas, dijo a este medio que un llenar un tanque de gasolina para recorrer 500 kilómetros puede rondar entre US$70 y US$80.
Señaló que cargar una batería en casa para recorrer unos 500 kilómetros con un vehículo eléctrico puede llegar a costar unos US$14.
Guatemala
La presidenta de la Asociación de Movilidad Eléctrica de Guatemala (Amegua), Nancy Chacón, realizó un análisis de los costos con un SUV de cinco pasajeros, proyectando una autonomía de 400 kilómetros.
En este análisis identificó un rendimiento de 0,1 kWh/km en el caso del carro eléctrico y de 30 gal/km en el de combustión.
Mientras el costo de recargar una batería fue de US$12,81, llenar el tanque para el carro a combustión costó US$55,05.