Bloomberg Línea — Violeta Barrios de Chamorro, expresidenta de Nicaragua, falleció este sábado en San José, Costa Rica, a los 95 años. La noticia fue confirmada por su familia mediante un comunicado oficial, en el que detallan que murió en paz, rodeada por sus hijos y personas cercanas.
Barrios de Chamorro hizo historia en 1990 al convertirse en la primera mujer elegida presidenta por voto popular en América Latina, al vencer a Daniel Ortega, líder del Frente Sandinista.
Su elección marcó el fin de una guerra civil de más de una década y el inicio de una transición democrática en Nicaragua. Durante su mandato (1990-1997), se enfocó en la pacificación nacional, la desmilitarización del país y la apertura hacia una economía de mercado, en un contexto marcado por la hiperinflación y la polarización política.
Nacida en Rivas el 18 de octubre de 1929, su vida dio un giro tras el asesinato en 1978 de su esposo, el periodista Pedro Joaquín Chamorro, opositor del régimen de Anastasio Somoza desde el diario La Prensa.
Este hecho la catapultó a la vida pública como símbolo de resistencia cívica y más tarde como lideresa de la Unión Nacional Opositora (UNO), una coalición de 14 partidos que logró imponerse en las elecciones presidenciales de 1990 con el 55% de los votos.
Uno de los momentos más recordados de su gestión fue el entierro simbólico de miles de armas en el Parque de la Paz, en Managua, un acto que reflejó su apuesta por el desarme y la reconciliación.
La expresidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, expresó su pesar por el fallecimiento de la exmandataria. “Representó la armonía y reconciliación de su pueblo y fue ejemplo de diálogo y cooperación entre las naciones de Centroamérica. Mi solidaridad con su estimable familia”, escribió en su cuenta de X.
En sus últimos años, Barrios de Chamorro vivió exiliada en Costa Rica, donde se trasladó en octubre de 2023, dejando su residencia en Managua.
Según el comunicado de sus familiares, sus restos descansarán temporalmente en San José, “hasta que Nicaragua vuelva a ser República”, en una clara alusión al deterioro democrático bajo el gobierno de Daniel Ortega, el mismo dirigente al que derrotó hace 35 años.
