Bloomberg Línea — La salud del expresidente brasileño Jair Bolsonaro, sometido a una intervención quirúrgica el pasado 13 de abril, empeoró en la mañana de este jueves, según un comunicado del Hospital DF Star, al que hizo eco en su cuenta en X.
“Presentó empeoramiento clínico, aumento de la presión arterial y agravamiento de las pruebas de laboratorio hepáticas. Hoy, le realizarán nuevas pruebas de imagen", informó el centro médico ubicado en Brasilia.
Bolsonaro fue sometido a una cirugía en el intestino, la sexta desde que fue apuñalado en el abdomen el 6 de septiembre de 2022, en medio de la campaña electoral rumbo a la Presidencia de Brasil.
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Desde la operación, ha permanecido en una unidad de cuidados intensivos (UCI), recibiendo nutrición parenteral y fisioterapia motora, así como cuidados para la “prevención de una trombosis venosa”, según el comunicado emitido por los especialistas que lo atienden.
“Hospital DF Star informa que el expresidente Jair Bolsonaro permanece internado en la UCI, en seguimiento postoperatorio”, agrega el documento.
Un día antes del pronunciamiento médico, el 23 de abril, Bolsonaro fue notificado de que contaba con cinco días para defenderse del proceso por presunta tentativa de golpe de Estado en Brasil.
“Podrá alegar todo lo que interese a su defensa, especificar las pruebas deseadas y enumerar los testigos”, dice la notificación.
El expresidente es señalado de haber conspirado en el asalto de los tres poderes del Estado de Brasil perpetrado el 8 de enero de 2023, luego de haber perdido los comicios presidenciales con Lula da Silva, en el que participó un sinnúmero de seguidores suyos.
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“¿Tengo cinco días para presentar mi defensa? ¿Cinco días? ¿Usted es consciente de que está dentro de una unidad de terapia intensiva?”, reprochó Bolsonaro a la encargada de notificarlo en el hospital.
Aunque la Corte Suprema de Brasil todavía no ha establecido una fecha para el juicio contra Bolsonaro y los cinco delitos que se le imputaron rondan los 40 años de cárcel, lo cierto es que por cuenta del proceso judicial tiene prohibido salir del país. De hecho, el pasado enero se le negó un permiso para asistir a la investidura de Donald Trump en Estados Unidos, ceremonia a la que fue invitado.