Bloomberg Línea — En la vida en pareja, la administración financiera puede ser una ventaja si se maneja con sabiduría, pero también una fuente de tensión si no hay unidad.
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Si está apunto de dar ese paso en su vida, recuerde que las finanzas a veces pueden convertirse en un desafío en las relaciones amorosas. Por eso, aquí siete reglas de oro para aquellas parejas que están atravesando la transición de construir una vida juntos y así evitar experimentar dificultades financieras.
Estos consejos surgen de especialistas del Grupo Bolsa Mexicana de Valores y de Liber Financultura, una plataforma de educación financiera en línea basada en Costa Rica.
• Comunicación: Definan al menos un día al mes para planificar sobre finanzas. No guarden secretos. Platíquense sobre sus planes de ahorro, inversión, de creación para su retiro.
• Dividir gastos: Establezcan un presupuesto que los dos puedan cumplir, según ingresos individuales. ¿Manejarán cuentas en conjunto o por separado?
• Mantener las finanzas personales: Dejen un espacio para sus finanzas y objetivos particulares.
• Historial de salud: Ser transparentes con problemas de salud actuales y pasados, que podrían eventualmente afectar alguna planificación a futuro en conjunto.
• Creencias: Hablar sobre sus creencias religiosas, políticas, filosóficas y obviamente financieras.
• No culparse por un error financiero: Recuerde que son un equipo y cualquiera puede equivocarse.
• Ahorro e inversión en pareja: Propónganse metas financieras sin perder la disciplina y el entusiasmo de llegar a un objetivo. Hablen sobre sus aspiraciones personales y de pareja, por ejemplo, adónde quisieran viajar o vivir, sus expectativas a largo plazo.
Estrategias para gestionar el dinero en pareja
Tres enfoques para un manejo financiero saludable en pareja, según Liber Financultura.
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1.- Cuenta compartida: Este método implica tener una cuenta única donde se depositen los ingresos de ambos, utilizada para alcanzar metas y sueños comunes como inversiones, ahorros y gastos. Ambos son socios en este proceso, no solo comparten gastos. Se ha comprobado que parejas que alcanzan el 4% superior en bienestar financiero suelen usar este enfoque a lo largo de los años.
2.- Aporte proporcional al ingreso: En este caso, cada miembro de la pareja contribuye proporcionalmente a sus ingresos, ya sea un 60%-40% o 85%-15%. La diferencia se maneja individualmente. Esto permite que quien tenga menores ingresos no se sienta presionado, y ambos se sientan igualmente comprometidos y merecedores de lo que están logrando juntos.
3.- 80/20: Aquí, ambos salarios se combinan y el 80% se destina a metas y objetivos comunes. El 20% restante (10% de cada uno) queda disponible para gastos personales, como educación, donaciones, ahorros o pequeños gustos. Es una forma de equilibrar lo colectivo y lo individual.