Ozzy Osbourne, el legendario líder de Black Sabbath e ícono del heavy metal, falleció el 22 de julio a los 76 años. Su deceso ocurrió a solo semanas del concierto con el que se despidió de la banda que lo encumbró en la cúspide musical y que le permitió forjar una fortuna de millones de dólares más allá de los escenarios.
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Giras, ventas de discos, su propio festival musical y un reality show forman parte del imperio que forjó y que se calcula en US$220 millones, de acuerdo con Celebrity Net Worth. El sitio especializado en patrimonios de famosos precisa que la cantidad incluye las aportaciones de Sharon Osbourne, esposa y manager del cantante.
Los principales ingresos del llamado “Príncipe de la oscuridad” provienen de su música, que acumula más de 100 millones de discos vendidos que a la fecha siguen generando regalías. Otro tanto viene de las giras que realizó como solista y junto a Black Sabbath que, de acuerdo con The Times of India, sumaron 1.300 conciertos en su carrera.
El 5 de julio la banda ofreció su último concierto, “Back to the Beginning” al que asistieron íconos como Metallica y Steven Tyler y que recaudó más de US$190 millones que se destinarán a organizaciones benéficas. Billboard destacó que la suma recolectada colocó al evento como el mayor concierto caritativo, superando lo recaudado por FireAid y FarmAid juntos.
Casi la mitad de la fortuna del cantante, diagnosticado con Parkinson en 2019, provenía del Ozzfest, un festival musical que él y su esposa Sharon Osbourne iniciaron a fines de la década de 1990.
El evento ha congregado a más de cinco millones de asistentes y generado ganancias por más de US$100 millones, según Celebrity Net Worth. Además “gracias al éxito de Ozzfest, Osbourne fue la primera estrella del hard rock y el heavy metal en alcanzar los US$50 millones en ventas de productos”, destacó el sitio.
Los ingresos por The Osbournes
Nacido en Birmingham en 1948, Osbourne se convirtió en un ícono que superó la escena musical y saltó a la televisión y el cine con apariciones especiales. En 2002, MTV estrenó “The Osbournes” un reality que hizo más famoso al cantante y también puso bajo los reflectores a toda su familia, incluidos sus hijos Jack y Kelly. Aimee, su otra hija, no apareció en la emisión por la que cada integrante cobró US$20.000 por episodio, según Parade.
El éxito del programa fue tal que Sharon Osbourne negoció un sueldo de US$5 millones solo para la segunda temporada.
El cantante además tuvo participaciones especiales en películas como “ Little Nicky” o “Trick or treat” y prestó su voz para cintas animadas como “Gnomeo & Juliet” y “Trolls World Tour”. El último concierto de Black Sabbath se convertirá en un filme que llegará a los cines en 2026.
El portafolio inmobiliario de Ozzy Osbourne
Osbourne depositó gran parte de su patrimonio en una amplia cartera de propiedades de lujo. Por ejemplo, en 2011 adquirieron por US$13 millones una megamansión en Hidden Hills California. La propiedad fue vendida en 2013 por US$11.5.
Dos años más tarde, en 2015, la familia adquirió otra mansión en Los Ángeles por US$12 millones y que vendieron por US$18 millones en 2022, cuando los Osbournes se mudaron a Inglaterra. En la nación británica adquirieron Welders House, una histórica propiedad cuya transacción nunca se reveló.
