Hacía falta que Harry Potter colisionara con el mundo de los relojes de lujo para agregar más magia a ese encantador universo. Prueba de ello es el Harry Potter Central Floating Tourbillon, el nuevo modelo ultralimitado de Kross Studio, que recrea un partido de Quidditch a través de sus manecillas.
El estudio suizo, reconocido por fusionar cultura pop, alta relojería y arte funcional, creó solo diez ejemplares de esta pieza que incorpora miniaturas de jugadores de las distintas casas de Hogwarts, suspendidos alrededor del mecanismo de tourbillon para dar la ilusión de un partido real en pleno vuelo.
Cada uno de estos diminutos personajes, pintados con los colores emblemáticos de la ficticia Escuela de Magia y Hechicería, mide apenas 2,79 milímetros de altura y fue esculpido en oro de 18 quilates con un nivel de detalle minucioso, según la compañía. “Este saber hacer revela los detalles más finos de sus rostros y uniformes de Quidditch, hasta el más mínimo acabado de sus escobas”.

Todos los elementos pueden apreciarse a través de la caja de titanio cubierta por cristal de zafiro, que también deja ver la magia mecánica del reloj: el calibre KS 7’006, compuesto por 232 piezas y con cinco días de reserva de marcha. La ingeniería de Kross Studio permite que el tourbillon parezca suspendido, como si fuera resultado de un hechizo de Potter y amigos.
Con un precio de CHF 120.000 (alrededor de US$150.052), la pieza destaca además por su esfera granulada y bisel interior en oro de 18 quilates con acabado opalino arenado.

Cada ejemplar se entrega en un set que incluye una caja musical capaz de interpretar fragmentos del icónico “Tema de Hedwig”, la melodía emblemática de la banda sonora de Harry Potter creada por John Williams.
La pieza es una colaboración entre Kross Studios y la prestigiosa manufactura REUGE, que ensambló cada elemento a mano.
El reloj de lujo de Harry Potter pone de manifiesto que, de la mano de una poderosa licencia, el mundo de la horología puede ser aún más encantador.









