Buenos Aires — La Libertad Avanza, el partido del presidente Javier Milei, triunfó en las elecciones legislativas de Argentina con el 40,71% de los votos y obtuvo una amplia diferencia respecto al segundo espacio, Fuerza Patria, con el 24,30%.
El triunfo, además de validar la gestión del Gobierno en estos primeros dos años, le suma representación en el Congreso que será clave para avanzar con las reformas y evitar la resistencia de la oposición a los decretos y vetos del Poder Ejecutivo.
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Con un nuevo sistema de votación (la Boleta Única de Papel) y una participación del 67,85% (la más baja desde el retorno a la democracia en 1983), el resultado sorprendió a oficialistas y opositores, con pocas encuestas que proyectaban a LLA superando el 40%.
Al igual que el expresidente Mauricio Macri, y a diferencia de Alberto Fernández, Milei logra una victoria en la elección de medio término. “El pueblo argentino decidió dejar atrás cien años de decadencia y persistir en el camino de la libertad, el progreso y el crecimiento”, fue la interpretación de Milei en su discurso desde el Hotel Libertador.
Un discurso que contrastó con el de Axel Kicillof, gobernador de la provincia de Buenos Aires, quien aseguró que fue una derrota del Gobierno, dado que 6 de cada 10 votantes rechazaron su propuesta. La lectura del gobernador bonaerense busca opacar una nueva interna que nace en el frente peronista.
La elección se caracterizó por una fuerte polarización entre La Libertad Avanza y el peronismo, con escaso espacio para opciones alternativas. Y mostró un mejor resultado en aquellos distritos en los cuales el oficialismo negoció con espacios aliados, como el PRO.
Milei ya había iniciado días atrás una reconfiguración de su gabinete. Tras este resultado favorable, en el corto plazo se revelará cómo avanza el nuevo esquema, si suma aliados y si da lugar a una mayor predisposición al diálogo con gobernadores y espacios moderados.
#1 Mapa pintado de violeta
La Libertad Avanza triunfó en la Ciudad de Buenos Aires y catorce de las 23 provincias, incluidas las más pobladas: Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y Mendoza. El resultado es un respaldo al armado electoral que diseñó el Gobierno y que llevó a LLA a ser la única fuerza presente en todo el país.
El peronismo triunfó en siete provincias, mientras que en las dos restantes (Corrientes y Santiago del Estero) la victoria fue de los oficialismos provinciales. Esto marca, a su vez, que sólo en ocho distritos hubo triunfo de los oficialismos locales.
Ese último dato revela como efectiva la estrategia de los gobernadores que se aliaron a La Libertad Avanza. Es el caso de Mendoza, Chaco, Entre Ríos y la Ciudad de Buenos Aires.
#2 Sorpresa en la provincia de Buenos Aires
Todas las encuestas daban por descontado un triunfo del peronismo en el mayor distrito del país, la provincia de Buenos Aires, que concentra el 40% del padrón y que está representada por 70 diputados (renueva 35 bancas en cada turno). Esa estimación tenía como antecedente reciente la victoria de Fuerza Patria en las elecciones locales del pasado 7 de septiembre por una ventaja de 13 puntos.
Se revirtió el escenario, pese a las dificultades que enfrentó La Libertad Avanza en esta elección, con la renuncia de José Luis Espert y la breve campaña de un candidato (Diego Santilli) que no figuraba en la boleta.
Al igual que en 2009, 2013, 2017 y 2021, el kirchnerismo sufre una nueva derrota en elecciones de medio término en la provincia de Buenos Aires, la quinta consecutiva. Pese a ser, este distrito, la mayor fortaleza de Cristina Fernández de Kirchner.
De las 35 bancas en juego, 17 serán para La Libertad Avanza, 16 para Fuerza Patria (ponía en juego 15) y 2 para el Frente de Izquierda.

#3 Nuevo Congreso
Estos resultados le darán a La Libertad Avanza una mayor estructura legislativa. Sumando al PRO, alcanzará el tercio tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado. Con los libertarios “puros”, esa cifra sólo se alcanza en la cámara baja. Será clave, en el corto plazo, cómo avanza la relación el partido que lidera Mauricio Macri y qué pasa con cada uno de los legisladores de este espacio.
Se verá, a su vez, un Congreso más atomizado, dado que el peronismo no pierde tanta fuerza en Diputados: baja de 98 a 97. Mientras que en el Senado la sangría es de 30 a 26.
El Gobierno buscará en los espacios dialoguistas poder llegar al quórum propio (129 en Diputados y 37 en el Senado) para poder avanzar con las reformas que se presentarán en adelante. Lo dijo el presidente Milei en su discurso: “Por fuera de los inadaptados de siempre, hay decenas de diputados y senadores de otros partidos con los que podemos encontrar acuerdos básicos. Es por eso que queremos invitar a la gran mayoría de los gobernadores que tendrán representación parlamentaria a discutir en conjunto estos acuerdos”.
#4 Ausentismo récord y nuevo sistema
En esta elección se vio también una importante apatía por parte de la ciudadanía a votar (es obligatorio). La participación alcanzó el 67,85%, la cifra más baja desde la vuelta a la democracia en 1983.
Pero fue también el estreno de un nuevo sistema de votación, la Boleta Única de Papel (BUP), que entre otros efectos demostró ser más ágil para el conteo. Al publicarse los primeros resultados cerca de las 21.30, ya estaban escrutadas más del 90% de las mesas de todo el país.

#5 Derrota de los gobernadores de Provincias Unidas
La polarizada elección dejó otro gran derrotado: el espacio Provincias Unidas conformado por siete gobernadores de distintos partidos políticos que también estaba representado en otros distritos. Sólo triunfó uno de los mandatarios provinciales: Gustavo Valdés, de Corrientes.
Luego, el espacio registró derrotas en Santa Fe, Córdoba, Chubut, Santa Cruz y Jujuy. Se replicó con pobres desempeños en la Ciudad de Buenos Aires y la provincia de Buenos Aires.
En miras al 2027, el resultado los debilita en el relacionamiento con la Casa Rosada. Tendrán menos margen para negociar en el Congreso.









