Buenos Aires — Con el pago del medio aguinaldo, diciembre vuelve a plantear una de las decisiones financieras más habituales de fin de año en Argentina: cómo administrar ese ingreso adicional para evitar perder contra la inflación y cubrirse de una eventual volatilidad cambiaria.
Los inversores, según su perfil, pueden contar con distintas opciones, desde dolarizar carteras y hacer colocaciones en fondos de bajo riesgo hasta estrategias más dinámicas vinculadas con acciones y CEDEARs.
“Lo más recomendable es evitar dejar el dinero inmovilizado en cuentas que no generan intereses y, en su lugar, optar por instrumentos que permitan preservar el valor de los ahorros y generar rentabilidad”, resaltó un estudio de la entidad financiera Reba.
En ese sentido, aseguró que “cada aguinaldo representa una oportunidad para mejorar la salud financiera personal”. “Lo importante es no dejarlo quieto: invertir, aunque sea una parte, puede marcar la diferencia y ayudarnos a cerrar el año con más previsibilidad”, puntualizó Vanesa Di Trolio, Business Manager de Reba.
El economista Gustavo Ber analizó que “los inversores se encuentran ansiosos respecto de conocer la estrategia financiera del año próximo, en particular sobre cómo se abonarán los pagos de enero y si habrá operaciones de liability-management y/o recompras de deuda".
Mientras tanto, remarcó que continúan las ruedas “de monótona calma en el dólar mayorista”, al tiempo que sigue el debate entre los operadores sobre el balance cambiario de un diciembre en el que suele tradicionalmente aumentar la demanda de dinero".
Ocurre que las mayores necesidades de pesos podrían reacomodar a la baja a la divisa, e incluso dejar espacio para que pudieran acelerarse las compras oficiales bajo la estrategia de acumulación de reservas, más allá de que viene ganando consenso de que la mayor parte debería venir por la cuenta financiera.
En qué invertir el aguinaldo
De acuerdo con el equipo de research de Banza-Adcap, “los bonos en pesos aparecen mejor posicionados para los próximos meses”. “Esperamos una paulatina normalización del mercado monetario y cambiario, junto con mayor previsibilidad y una reducción de la volatilidad”, argumentó.
En un informe, también expresó que “las carteras de aguinaldo, por su propia naturaleza, están pensadas para potenciar los rendimientos en el mediano y largo plazo”. “En este sentido, la diversificación en instrumentos dolarizados responde a esa premisa, al permitir preservar el valor del capital y capturar oportunidades en moneda dura”, afirmó.
Por su parte, un reporte de IOL invertironline explicó que los Fondos Comunes de Inversión (FCI) son alternativas para potenciar ahorros, dado que “permiten invertir montos bajos, seguir todo desde el celular y retirar el dinero cuando el usuario lo necesite”.
La renta fija es otra variable atractiva, dado que permite “diversificación, protección e ingresos predecibles invirtiendo en bonos”, sostuvo el análisis el cual explicó: “Para quienes ya dolarizaron parte del aguinaldo o buscan soluciones estables, la renta fija suma diversificación y previsibilidad”.
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En ese sentido, destacó dos bonos, en pesos y dólares, orientados a perfiles conservadores que buscan proteger capital sin resignar oportunidades de crecimiento:
- BONCER junio 2026 (TZX26): bono ajustado por CER con un rendimiento estimado de inflación de más de 5,8% anual. Con vencimiento en junio de 2026, resulta atractivo para lograr un rendimiento por encima de la inflación.
- Global 2035 (GD35): un bono largo en dólares de la curva soberana Argentina con buenas perspectivas en un contexto de baja del riesgo país. Ofrece un rendimiento anual del 10% y un potencial interesante ante la continuidad de las mejoras económicas argentinas. Ideal para perfiles más agresivos que buscan potenciar su retorno en dólares.
También apuntó a la posibilidad de invertir el aguinaldo en acciones y CEDEARs: “Para quienes buscan mayores rendimientos asumiendo más riesgo, IOL sugiere una combinación equilibrada de acciones y CEDEARs, logrando diversificación por sectores y geografías”.
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Algunas de las principales alternativas, según IOL, incluyen:
- Vista Energy (VIST): operador independiente líder en Vaca Muerta. “Su tesis se centra en el desarrollo de inventario de perforación de petróleo no convencional. Cotiza a mismos valores de hace un año pero con ingresos que crecieron en más del 80%”, apuntó.
- YPF (YPFD): el análisis aseguró que es ”la principal compañía integrada del sector energético argentino, con más del 55% de participación en el mercado de venta de combustibles, 1.600 estaciones de servicio y más de la mitad de la capacidad de refinación del país".
- S&P 500 (SPY): IOL describió que es “el principal índice estadounidense englobando a las 500 empresas más importantes de dicho país” y “al invertir en este CEDEAR, se adquiere una porción de las empresas más grandes del mundo, lo que permite diversificar la cartera de forma eficiente”.
- Meta Platforms (META): se trata de una de las tecnológicas más relevantes del mundo: “Invierte en inteligencia artificial para potenciar su negocio publicitario y desarrollar nuevos productos. Con precios de la acción en niveles similares al inicio de año pero con un negocio que no para de crecer”
- ETF de países emergentes (EEM): replica el MSCI Emerging Markets con más de 1.000 compañías de gran y mediana capitalización en China, Taiwán, India, Corea del Sur y Brasil. “Con fuerte presencia del sector tecnológico asiático —TSM, Xiaomi, Tencent, Samsung— es una manera eficiente de sumar crecimiento global en un solo instrumento", manifestó.
Por otro lado, para perfiles conservadores, el trabajo también aseguró que una opción es dolarizar el aguinaldo mediante, por ejemplo, la compra de dólar MEP. Señaló que, una vez realizada esa operación, se puede acceder al Fondo Común IOL Dólar Ahorro Plus (IOLDOLD) para invertir con bajo riesgo y rescatarlos en 24 horas, así como también volcarse a la cuenta remunerada en dólares, que rinde 2% anual, sin riesgo.
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