Buenos Aires — La deuda neta del Estado argentino en su conjunto habría tenido una caída en torno a los US$18.000 millones entre el tercer trimestre de 2023, previo a la asunción de Javier Milei como presidente de la Nación, y el primer trimestre de este año, según estimaciones del bróker Facimex Valores.
Esta cifra equivale a un recorte en los pasivos del país que está en el orden de 4,4 puntos del Producto Bruto Interno (PBI), dejando la deuda neta consolidada en US$247.000 millones o, dicho de otro modo, 36,1% del PBI, en el primer cuarto de 2025.

“Se trata del menor nivel de apalancamiento neto consolidado del sector público nacional desde el primer trimestre de 2019, aunque todavía está unos 7,8 puntos por encima del primer trimestre de 2018, momento en que Argentina perdió el acceso al mercado", sostiene el informe de Facimex Valores.
Según los autores del estudio, esta medida de apalancamiento ya encadenó cuatro trimestres consecutivos de caída, “principalmente producto del equilibrio fiscal, la recuperación de la demanda de dinero y el crecimiento económico, aunque también con ayuda de la apreciación cambiaria”.
VER MÁS: Reservas del Banco Central argentino suben tras nuevo desembolso del FMI
Un nivel apto para volver al mercado
Facimex Valores también sostiene que las métricas de deuda de Argentina ya son compatibles con un eventual regreso al financiamiento en los mercados. Según su análisis:
- La deuda con privados ronda el 25% del PBI.
- La deuda externa total está por debajo del 20% del PBI.
- La deuda en moneda extranjera con privados representa menos del 15% del PBI.
- Y la deuda externa con privados (principalmente con fondos del exterior) equivale a solo 8% del PBI, cuando hace algunos años llegó a superar el 20%.
El documento remarca que, si bien la deuda con organismos bilaterales y multilaterales —especialmente con el FMI— sigue siendo significativa, no representa un riesgo real de refinanciamiento, en tanto Argentina continúe cumpliendo con el programa pactado con el Fondo. Bajo este marco, consideran que es cuestión de tiempo para que el soberano recupere el acceso al financiamiento de mercado.
VER MÁS: Fitch mejora calificación creditica de la provincia de Córdoba
¿Por qué deuda neta consolidada?
Según los autores del estudio, si bien lo habitual es analizar la deuda del Tesoro, ellos prefieren utilizar una medida propia a la que llaman deuda neta consolidada. Esta métrica incorpora tanto la deuda del Tesoro como la del Banco Central (BCRA), pero con algunos ajustes clave:
- “Consolidada” significa que se descuenta la deuda que está en manos de otras agencias del sector público nacional, como el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) de la ANSES y el Banco Nación.
- “Neta” implica que se restan los activos líquidos disponibles, es decir, las reservas netas del BCRA y los depósitos del Tesoro (en pesos y dólares), ya sea en el sistema financiero o en el propio BCRA.
Esta medida, explican desde la firma financiera, refleja de manera más fiel la evolución de la deuda pública, ya que tiene en cuenta dinámicas relevantes como el uso de reservas netas, la emisión de pasivos remunerados por parte del BCRA y el traspaso de deuda del BCRA al Tesoro, entre otros factores.
Por otro lado, los autores del estudio explican que eligieron cotejar contra el 3° trimestre de 2023 porque dicho período permite una comparación “más justa” que el 4° trimestre de 2023, “que estuvo fuertemente afectado por la devaluación del peso”.