Buenos Aires — En los próximos cinco años se van a llevar a cabo importantes obras de infraestructura en Argentina vinculadas al sector de gas y petróleo, con el objetivo de evacuar la producción cada vez más importante de Vaca Muerta, la formación no convencional de Argentina.
Esas obras permitirán aumentar también la exportación energética para que el sector alcance en 2030 los US$30.000 millones en ingreso de divisas para el país. Pero no será sencillo, llevar a cabo esas inversiones demandará capacidad de construcción, recursos humanos y financiamiento.
Entre las principales obras que se llevarán a cabo está Vaca Muerta Sur, un oleoducto de 437 kilómetros que unirá Vaca Muerta Sur con el océano Atlántico para exportar petróleo; la ampliación del Gasoducto Perito Moreno para aumentar el transporte de gas hacia el Gran Buenos Aires; gasoductos dedicados desde Vaca Muerta hacia el Océano Atlántico para la licuefacción y exportación de GNL, entre otros.
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Vaca Muerta Sur
La construcción de VMOS, la empresa conformada por siete petroleras y que demandará una inversión de US$3.000 millones, estará a cargo del consorcio conformado por Techint y Sacde (subcontrolada por Pampa Energía), las dos mayores constructoras del país.
Será financiado en gran parte por un project finance: un préstamo sindicado por cinco bancos internacionales por US$1.700 millones. Ese préstamo se firmaría en los próximos días y estará a cargo del JP Morgan & Chase, Santander, Citi, Deutsche Bank e Itaú.
“Es un proyecto con muy poco riesgo de poder concretarse”, dijo Mauricio Martín, VP de Midstream & Downstream de YPF en un evento organizado por Econojournal. El ducto comenzaría a operar en 2026 transportando 180 mil barriles día. Y tiene una capacidad máxima de 550 mil barriles, pero Martín aclaró que “con 10% más de inversión se llega a los 700 mil”.
“No hay registro de un oleoducto de estas características en casi 50 años”, dijo Carlos Coletto, director de la unidad de negocios de Oil & Gas de Sacde.
El presidente de YPF aseguró que la obra viene “tres meses adelantada”, pero que ve un cuello de botella en la construcción de la terminal portuaria. Martín señaló que “la parte onshore y offshore de la terminal es una de las más críticas”.
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Exportación de GNL
La exportación de GNL tiene en Argentina tres proyectos: uno llevado a cabo por Southern Energy, un consorcio de cinco empresas (PAE, Golar, YPF, Pampa Energía, Harbour) y otros dos liderados por YPF en convenio con Shell y la italiana ENI respectivamente.
Southern Energy ya cuenta con un RIGI aprobado y la autorización para exportar para la primera parte del proyecto que consta en un barco de licuefacción que llegará en 2027 pero en 2028 llegará un segundo barco. Para esa instancia, la empresa aspira a contar con una extensión del RIGI y una nueva autorización. Pero para abastecer esa demanda, que serán 26 millones de metros cúbicos de gas por día, construirán un gasoducto dedicado desde Vaca Muerta. La inversión total del proyecto supera los US$6.000 millones.
“Hay mucho interés en Argentina como nuevo punto de suministro mundial. Sobre todo con los temas geopolíticos que ocurren con los productores de GNL actuales. Tener una opción más es muy bien recibida”, dijo Rolando Freyre, VP Gas & Energía de PAE, en el mismo evento.
De avanzar la segunda y tercera fase de los proyectos de YPF, en línea a los acuerdos con Shell y ENI, también será necesario construir un nuevo gasoducto.
Perito Moreno y exportación a Brasil
El Gobierno argentino convocó a finales de mayo la licitación para la obra de ampliación del Gasoducto Perito Moreno (antes Néstor Kirchner), tras una presentación de Transportadora de Gas del Sur (TGS), una de las compañías que participará de la compulsa.
Este gasoducto fue fruto de una obra pública desarrollada en 2022, una de las últimas grandes obras de infraestructura desarrolladas por el Estado. Ahora se busca la ampliación desde los 21 millones de metros cúbicos diarios a 35 millones, pero llevado a cabo por el sector privado. Prevé una inversión de US$500 millones.
Este proyecto se interpuso sobre el objetivo del Gobierno argentino de avanzar en una fase 2 del gasoducto, que constaba en una traza desde la provincia de Buenos Aires al sur de Córdoba.
Pero ahora otra empresa privada propone una alternativa: un gasoducto desde Neuquén hasta Córdoba. Lo propuso Daniel Ridelener, CEO de Transportadora de Gas del Norte (TGN). “Esa primera etapa la estamos viendo en el orden de los 20 millones de metros cúbicos, sería un proyecto de US$2.000 millones”, precisó el ejecutivo en el evento de Econojournal.
Esa obra sería clave para aumentar el transporte de gas hacia el norte de país y comenzar a proyectar un mercado de mayor volúmen hacia Brasil. Para Ridelener, la clave en las negociaciones con Brasil para fortalecer el mercado regional pasa por reunir la demanda, modificar cuestiones regulatorias y contar con el financiamiento. Para Brasil, la clave es el precio y contratos cortos.
El CEO de TGN agregó que llevar a cabo las obras de infraestructura para un mercado de 10 millones de metros cúbicos por día a Brasil, ya sea por Bolivia, Paraguay o Uruguayana, demandará inversiones cercanas a US$1.500 millones.