Bloomberg Línea — La reforma laboral del Gobierno Petro, que murió y revivió en el Senado de la República, logró un triunfo importante: fue aprobada en su tercer debate. Sin embargo, todavía tiene una prueba de fuego que atravesar.
Si bien para el Ejecutivo es una noticia positiva, el ministro del Interior, Armando Benedetti, indicó que todavía no es tiempo de celebrar.
Lo anterior, teniendo en cuenta que al proyecto le queda un último debate en la Plenaria del Senado para así pasar a sanción presidencial y convertirse en ley de la República. Una instancia en la que, como ya ha quedado demostrado con las reformas del Gobierno, podría pasar cualquier cosa.
“Lo más importante es que se buscó y se logró el recargo de 100% para los días festivos y para los dominicales.También que a partir de las 7:00 de la noche se cobre la hora extra y sin excepciones, aplicado a todas las empresas”, destacó Benedetti sobre el contenido de la reforma.
Asimismo, agregó que el logro es bastante amplio para el Gobierno Nacional, después de que la iniciativa se hundiera en la Comisión Séptima del Senado y reviviera mediante la figura de apelación.
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Otros de los artículos que fueron aprobados en la Comisión Cuarta de la corporación fueron el de un tiempo límite máximo de cinco años en los contratos a término fijo, bajo la obligación de que tras ese tiempo se convierten en contratos a término indefinido.
También el artículo que propone un apoyo económico de 1,5 salarios mínimos para las organizaciones que trabajan con aprendices del Sena.
Angélica Lozano, senadora presidenta de la Comisión Cuarta, expresó que esta corporación le le cumple a Colombia y le entrega una reforma laboral moderna, drástica, que cambia de fondo, que es profunda.
“Será una ley laboral en junio y el Presidente tiene que dejar su embeleco político de la consulta popular. Zapatero a sus zapatos, el gobierno a gobernar, el Congreso hace una buena reforma laboral y hay que desactivar, dejar ese único plan del gobierno que es politiquear y hacer campaña eterna con una consulta”, manifestó la congresista.
Y agregó que fue un trabajo maravilloso de 13 días, 12 horas diarias, de lunes a viernes, y que con todas las diferencias políticas se puso por encima al país. “Esto es una prueba de que sí podemos encontrar soluciones para Colombia, desactivar el sectarismo que intoxica el ambiente”.
