Derrame de petróleo en Ecuador deja 150.000 afectados, según evaluación de la ONU

A raíz del desastre en Esmeraldas, los medios de vida de las personas se han visto impactados, especialmente en la pesca, el agro y la recolección de mariscos, dice oficina de Naciones Unidas.

Personal de Petroecuador en actividades de muestreo de agua y suelo en las playas de Esmeraldas, el 5 de abril de 2025.
14 de abril, 2025 | 07:54 PM

Bloomberg Línea — El derrame masivo de petróleo en la provincia de Esmeraldas el mes pasado ha dejado al menos a 150.000 personas necesitadas de asistencia humanitaria, según una evaluación de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (OCHA), de la ONU.

Ver más: Más 25.000 barriles de crudo se regaron en Esmeraldas tras rotura del Sote: Petroecuador

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Además de los afectados, el equipo de Evaluación y Coordinación de Desastres de las Naciones Unidas (UNDAC), que forma parte de la OCHA y estuvo a cargo de la evaluación, también advirtió “un aumento preocupante de las enfermedades respiratorias y gastrointestinales, así como un acceso limitado al agua potable”.

Trabajos de reparación de la tubería del SOTE, que se rompió por un deslizamiento de tierra, en El Vergel (Esmeraldas), el 17 de marzo de 2025.

El desastre, causado por la ruptura del oleoducto Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE), provocó el derrame de más de 25.000 barriles de petróleo, explicó la estatal Petroecuador.

La falla contaminó el estuario de Caple, los ríos Viche y Esmeraldas, y llegando al océano. Once parroquias se vieron afectadas, tres playas del cantón Esmeraldas y seis del cantón Rioverde.

En la exposición informativa del lunes, Stéphane Dujarric, portavoz del Secretario General de la ONU, dijo que, a raíz del derrame, los medios de vida de las personas se han visto afectados, especialmente en la pesca, la agricultura y la recolección de mariscos.

Más de 37.000 mujeres han perdido sus medios de ganarse la vida, de acuerdo con estimaciones de la OCHA. Muchas son recolectoras de moluscos y ahora se enfrentan a crecientes riesgos para la salud y a la exposición a la violencia de género.

Naciones Unidas está analizando el agua de los ríos afectados, las plantas de tratamiento y los mariscos del océano en busca de hidrocarburos y metales pesados, ante la posibilidad de repercusiones ambientales y sanitarias a largo plazo.

Dujarric también reiteró el compromiso de la ONU de apoyar al Gobierno con asistencia técnica, al tiempo que informó que la coordinadora residente de las Naciones Unidas en Ecuador, Lena Savelli, compartió las conclusiones y recomendaciones de la evaluación con los ministros del Gobierno ecuatoriano.