Bloomberg — En la capital de Venezuela, apenas hay indicios de que este domingo se celebrarán elecciones.
Se ven las mismas vallas publicitarias de las elecciones presidenciales del año pasado en las autopistas de Caracas. La única mención a los comicios parlamentarios y regionales de este fin de semana se encuentra en la televisión estatal, que muestra a los principales dirigentes del partido gobernante en mítines.
En cambio, la depreciación de la moneda local y la galopante inflación acaparan la atención de los venezolanos. Más allá de un público desmoralizado —algunos demasiado ocupados tratando de llegar a fin de mes—, la líder opositora María Corina Machado aboga por un boicot a las elecciones.
Ver más: EE.UU. no renovará licencia petrolera de Venezuela, dice Marco Rubio: ¿revés para Chevron?
Las encuestas más fiables del país estiman que menos de tres de cada diez ciudadanos acudirán a las urnas.
Todo ello favorece al presidente Nicolás Maduro en su afán por consolidar aún más su control sobre la nación.
Ansioso por pasar página tras las elecciones presidenciales de julio, en las que Maduro fue declarado ganador a pesar de las pruebas en contra, su gobierno adelantó los comicios, que normalmente se celebran en diciembre. Es una táctica habitual para reducir el tiempo de preparación de la oposición.
También ha comenzado a fracturar a la oposición y a sus seguidores, dividiendo a quienes quieren boicotear lo que ven como elecciones ilegítimas de quienes piensan que sigue siendo la mejor forma de participar en la vida política del país. “Yo no voto” se puede leer en las paredes de todo el país.
“Creo que los resultados ya están amañados”, afirmó Ryan Berg, director del Programa para las Américas del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales de Washington. “Maduro quiere poder decir que han celebrado elecciones, que son un país democrático y que lo son simplemente porque han celebrado elecciones, y la oposición que decidió participar ha ganado algunos de los escaños que se les ha permitido ganar”.
Ver más: Maduro dice que voluntad de “recuperar totalmente” el Esequibo es “inquebrantable”
Enemigos por todas partes
Con apagones continuos, una inflación de tres dígitos y escasez de divisas, comienza a parecer que se repiten los días de la crisis económica de 2019. Y la situación va a empeorar.
La presión de EE.UU. busca golpear el importante sector petrolero del país, con la exigencia a Chevron Corp. (CVX) de detener sus operaciones en la nación andina antes del 27 de mayo. Se estima que la economía venezolana se contraerá un 5% interanual en 2025, 8,5 puntos porcentuales por debajo de una previsión anterior, según Tim Hunter, economista senior para América Latina de Oxford Economics.
Gran parte de la retórica del partido gobernante se ha centrado en problemas externos.
Ver más: Corte Internacional de Justicia pide a Venezuela no celebrar elecciones en el Esequibo
Maduro ha condenado repetidamente la deportación por parte de EE.UU. de migrantes venezolanos a una prisión de máxima seguridad en El Salvador. Más recientemente, se centró en reunir a una niña de dos años con sus padres, ambos deportados de EE.UU.
Su devolución a su madre en Venezuela la semana pasada acaparó los noticiarios. Maduro agradeció a Trump y a su enviado especial, Ric Grenell, por traer a la niña de vuelta. Hizo que la pequeña lo acompañara en eventos en el palacio presidencial. Desde entonces, la televisión estatal ha transmitido repetidamente un emotivo corto animado que narra el viaje de la niña a EE.UU. y, finalmente, su regreso a los brazos de Maduro.
El lunes, el ministro del Interior, Diosdado Cabello, anunció la detención de 38 personas que presuntamente planeaban perturbar las elecciones utilizando explosivos para atacar embajadas, la red eléctrica, hospitales y comisarías de policía. Venezuela también suspendió los vuelos procedentes de Colombia, alegando que así fue como muchos de los acusados ingresaron al país.
Y, por último, el gobierno ha reavivado la disputa territorial por el Essequibo con Guyana. A petición de ésta, la Corte Internacional de Justicia de las Naciones Unidas ordenó a Venezuela no celebrar elecciones en ese territorio, una decisión que Maduro rechazó. El gobierno ha presentado candidatos para la zona.
Ver más: La madre de Machado huye de Venezuela en operación “impecable” de EE.UU.
“Es posible que las tensiones no se disipen tras las elecciones en Venezuela si Maduro considera que sigue siendo necesario avivar el sentimiento nacionalista o si intenta influir en el resultado de las elecciones generales de Guyana previstas para finales de este año”, escribió Nicholas Watson, director general de Teneo, en una nota reciente a sus clientes.
Oposición fragmentada
Este fin de semana, los venezolanos podrán elegir entre una selección habitual de candidatos del partido gobernante, entre ellos la esposa de Maduro, Cilia Flores; su hijo, Nicolás Maduro Guerra; y su principal aliado, Jorge Rodríguez.
Entre las pocas caras nuevas y guiños al movimiento chavista original se encuentra el hermano del difunto Hugo Chávez, Adán Chávez, que busca recuperar el control en el bastión chavista de Barinas, ciudad natal de la familia, donde sufrieron una rara derrota en las últimas elecciones regionales.
El equipo de Machado ha enviado un comunicado a gobiernos extranjeros en el que detalla las irregularidades del proceso electoral. Entre ellas, la eliminación del código QR de las papeletas, clave para que la oposición pudiera realizar un recuento rápido y paralelo el año pasado.
“El 28 de julio ya votamos, el 25 de mayo no”, dijo Machado en un video la semana pasada.
Aun así, sigue habiendo un grupo de políticos opositores que se han inscrito como candidatos.
Ver más: Así fue el momento en que niña venezolana repatriada se reunió con su madre y Maduro
Entre ellos figuran el exgobernador y dos veces candidato presidencial Henrique Capriles, y los exdiputados Stalin González y Tomás Guanipa, tradicionalmente defensores de la participación.
Capriles y Guanipa recuperaron este año su derecho a presentarse a elecciones, lo que desató rumores de que habían negociado con el régimen de Maduro.
“En cada elección el gobierno habilita e inhabilita”, afirmó Capriles. “Es obvia la razón por la que me habilitaron, para sembrar intrigas”.
Guanipa, que rechazó públicamente la nueva inhabilitación impuesta por el gobierno el año pasado, afirmó que nunca se le notificó oficialmente ninguna desde que se le aplicó la anterior en 2020.
También se presenta el ex preso político Juan Requesens, de 36 años, candidato a gobernador del estado de Miranda, que incluye cuatro de los cinco municipios que componen Caracas.
“Durante demasiados años hemos venido participando con las condiciones que nos impone el gobierno”, dijo Requesens, uno de los líderes más destacados del movimiento estudiantil contra Chávez, que encabezó manifestaciones masivas contra Maduro en 2014 y 2017.
“Ojalá pudiéramos sentarnos a negociar la transición y el cambio”, añadió. “Pero mientras no, hay que avanzar”.
Lea más en Bloomberg.com