Bloomberg — El fondo soberano de Noruega, valorado en US$2 billones, invertirá en un fondo de transición energética gestionado por Brookfield Asset Management (BAM), en su intento de ampliar su cartera de activos renovables no cotizados.
Norges Bank Investment Management, el mayor fondo soberano del mundo, dijo este viernes que destinará US$1.500 millones al Fondo de Transición Global II de Brookfield Asset Management. El vehículo de inversión tiene como objetivo la transformación empresarial, la energía limpia y las soluciones sostenibles.
La inversión “nos permitirá invertir en proyectos que desarrollen infraestructuras de energías renovables, al tiempo que apoyamos la transición más amplia hacia soluciones con bajas emisiones de carbono en todos los sectores”, declaró en el comunicado Harald von Heyden, responsable global de energía e infraestructuras del fondo.
Ver más: Noruega apuesta por la energía verde: su fondo soberano invierte en redes eléctricas
Se trata de la segunda inversión indirecta de este tipo realizada por el NBIM, que destinó 900 millones de euros (US$21.100 millones) en agosto del año pasado a un fondo gestionado por Copenhagen Infrastructure Partners. La mayor parte de las participaciones en renovables no cotizadas del NBIM son en activos físicos que van desde parques eólicos marinos a paneles solares. A principios de esta semana lideró un consorcio para comprar una participación del 46% en la red eléctrica alemana de Tennet Holding BV.
Von Heyden declaró a principios de este mes que el fondo patrimonial ha destinado hasta ahora US$28.000 millones de los US$238.000 millones destinados a infraestructuras de energías renovables. Hizo su primera incursión en renovables en 2021 con una participación en los parques eólicos marinos holandeses Borssele 1 y 2. A finales de junio, contaba con 10 inversiones en cinco países, y las infraestructuras renovables no cotizadas representaban alrededor del 0,4% de sus inversiones totales.
Lea más en Bloomberg.com