Bloomberg — El personal de la Comisión Federal de Comercio en Washington recibió el miércoles la noticia de que deberá abandonar sus oficinas actuales en los próximos meses y trasladarse al edificio que dejará libre la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional, según personas familiarizadas con el asunto.
La sorpresiva orden, dijeron las personas, provino del Departamento de Eficiencia Gubernamental, el equipo dirigido por Elon Musk al que el presidente Donald Trump ha encargado reducir la fuerza laboral federal.
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A las personas se les concedió el anonimato para discutir la decisión.
La mayoría de los 1.300 empleados de la agencia antimonopolio y de protección del consumidor trabajan en un edificio de Washington que también alquila espacio a varias otras agencias federales. El contrato de arrendamiento de 10 años del espacio de la FTC finalizó el año pasado, pero se había prorrogado por tres años más hasta 2027.
La sede de la FTC, que alberga a los cinco comisionados y altos dirigentes de la agencia, se encuentra en un edificio gubernamental diferente, a pocas manzanas del edificio de la USAID.
La Administración de Servicios Generales, que alquila espacio de oficinas en nombre de las agencias federales, había solicitado la aprobación del Congreso para un nuevo contrato de arrendamiento de 20 años para la FTC. Aunque el Senado aprobó la nueva solicitud de arrendamiento en noviembre, la Cámara aún no la había retomado.
A partir del jueves, la lista de la GSA de oficinas arrendadas indicaba que el contrato de la FTC expiraría el viernes.
Un portavoz de la FTC no respondió a una solicitud de comentarios.
Trump y Musk, el CEO de Tesla Inc. (TSLA) y SpaceX, sostienen que la USAID debería cerrarse. La administración colocó a la mayoría de los 10.000 empleados de la agencia en licencia administrativa y canceló docenas de contratos, lo que afectó a proyectos desde África hasta Ucrania y provocó la pérdida de cientos de puestos de trabajo en todo Estados Unidos.
A los empleados de la USAID se les dijo que retiraran sus pertenencias personales de la sede de la organización esta semana.
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La página web del Departamento de Eficiencia Gubernamental afirma haber ahorrado más de US$11 millones al poner fin al contrato de arrendamiento de la FTC en Washington. La página web no indica cómo se han calculado esos ahorros declarados.
Según la GSA, la agencia paga US$13,6 millones anuales por el espacio según los términos actuales del contrato de arrendamiento. La última vez que la FTC cambió de oficinas, en 2013, gastó unos US$75 millones en la mudanza y el equipamiento del nuevo espacio.
Con la ayuda de Josh Sisco.
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