Bloomberg — El representante por Nueva York Mike Lawler advirtió a sus compañeros republicanos que no operen para derrocar al presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, diciendo que estarían “jugando con fuego” y perdiendo el tiempo justo cuando el presidente electo Donald Trump asume el cargo.
Con la votación sobre la presidencia de la Cámara prevista para el 3 de enero, Johnson se ha enfrentado a las críticas de algunos legisladores ultraconservadores tras respaldar un acuerdo temporal sobre el gasto que no incluía la exigencia inicial de Trump de elevar el techo de la deuda estadounidense.
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“El hecho es que esta gente está jugando con fuego”, dijo Lawler en el programa This Week de la cadena ABC. “Y si piensan que de alguna manera van a conseguir un portavoz más conservador, se están engañando a sí mismos”.
Los republicanos pueden contar con 219 escaños en la Cámara, dijo Lawler, y necesitan 218 votos para elegir a un portavoz sin el apoyo demócrata. El congresista republicano Thomas Massie, de Kentucky, ha dicho que no apoyará a Johnson.
Una lucha de facciones entre los republicanos de la Cámara el año pasado llevó a la destitución de Kevin McCarthy como presidente de la Cámara, que Lawler calificó como "la cosa más estúpida que he visto en política".
"Dicho esto, destituir a Mike Johnson sería igualmente estúpido", dijo.
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La decisiva victoria electoral de Trump en noviembre y su influencia sobre los republicanos de la Cámara de Representantes significa que podría ejercer su poder para intentar instalar a otra persona como presidente de la Cámara, aunque no ha adoptado una postura pública sobre el futuro de Johnson.
"No podemos hacer nada a menos que tengamos un portavoz, incluida la certificación de la elección del presidente Trump el 6 de enero", dijo Lawler. "Así que perder el tiempo por una pelea de comida intramuros sin sentido es una broma".
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