Bloomberg — Mercedes-Benz Group AG confirmó que trasladará la producción de su vehículo utilitario deportivo GLC a EE.UU., ya que los aranceles del presidente Donald Trump elevan los costos y amenazan con hacer menos competitivos los coches importados.
La producción del GLC fabricado en EE.UU. en la fábrica de Mercedes en Alabama comenzará a finales de 2027, dijo el fabricante de automóviles alemán a última hora del lunes. La empresa había anunciado el traslado a principios de este mes, sin especificar el modelo.
“Si ve lo que queremos conseguir con los volúmenes de este modelo, tiene sentido traerlo a EE.UU.”, dijo el jefe de Mercedes Norteamérica, Jason Hoff, durante una rueda de prensa.
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Los fabricantes de automóviles alemanes están entre los más afectados por los mayores gravámenes de Trump a las importaciones de automóviles. La fuerte demanda de SUV más rentables y el lento cambio de los consumidores estadounidenses hacia los vehículos eléctricos lo convierten en un mercado lucrativo para fabricantes como Mercedes, BMW AG y Porsche AG.
El GLC, fabricado en Alemania, es el importado estadounidense más popular de Mercedes. El fabricante de automóviles de lujo vendió 64.163 unidades del SUV en el país el año pasado, lo que supone un aumento del 58% respecto al año anterior.
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