Bloomberg — OpenAI ha pedido a la administración Trump que ayude a proteger a las empresas de inteligencia artificial de un creciente número de regulaciones estatales propuestas si comparten voluntariamente sus modelos con el gobierno federal.
En un conjunto de sugerencias políticas de 15 páginas publicado el jueves, el fabricante de ChatGPT argumentó que los cientos de proyectos de ley relacionados con la IA actualmente pendientes en todo EE.UU. corren el riesgo de socavar el progreso tecnológico de EE.UU. en un momento en que se enfrenta a la renovada competencia de China.
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OpenAI afirmó que la administración debería considerar la posibilidad de proporcionar cierto alivio a las empresas de IA grandes y pequeñas de las normas estatales, si se promulgan y cuando se promulguen, a cambio de un acceso voluntario a los modelos.
La recomendación fue una de las varias incluidas en la respuesta de OpenAI a una solicitud de aportaciones públicas emitida por la Oficina de Política Científica y Tecnológica de la Casa Blanca en febrero, a medida que la administración redacta una nueva política para garantizar el dominio estadounidense en IA. El presidente Donald Trump anuló previamente la extensa orden ejecutiva de la administración Biden sobre IA y encargó a la oficina de ciencia que desarrollara un Plan de Acción sobre IA para julio.
Hasta la fecha, ha habido una notable ausencia de legislación federal que regule el sector de la IA. La administración Trump ha señalado en general su intención de adoptar un enfoque de no intervención en la regulación de la tecnología. Pero muchos estados están sopesando activamente nuevas medidas sobre todo, desde las falsificaciones profundas hasta el sesgo en los sistemas de IA.
Chris Lehane, vicepresidente de asuntos globales de OpenAI, dijo en una entrevista que el Instituto de Seguridad de la IA de EE.UU., un grupo gubernamental clave centrado en la IA, podría actuar como principal punto de contacto entre el gobierno federal y el sector privado.
Si las empresas colaboran con el grupo de forma voluntaria para revisar los modelos, el gobierno podría proporcionarles “protecciones en materia de responsabilidad, incluida la exención de las normativas estatales centradas en la seguridad de los modelos de frontera”, según la propuesta.
“Parte del incentivo para hacer eso debería ser que no tienes que pasar por el asunto estatal, que no va a ser ni de lejos tan bueno como lo sería el nivel federal”, dijo Lehane.
En sus recomendaciones políticas, OpenAI también reiteró su llamamiento para que el gobierno tome medidas de apoyo a las inversiones en infraestructuras de IA y pidió una reforma de los derechos de autor, argumentando que la doctrina estadounidense de uso justo es fundamental para mantener el liderazgo en IA. OpenAI y otros desarrolladores de IA se han enfrentado a numerosas demandas por derechos de autor sobre los datos utilizados para construir sus modelos.
Si los “desarrolladores chinos tienen acceso sin restricciones a los datos y las empresas estadounidenses se quedan sin acceso de uso justo”, dijo la empresa, “la carrera por la IA está efectivamente acabada”.
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OpenAI también propuso que las empresas de IA tengan acceso a los datos en poder del gobierno, que podrían incluir información sobre atención sanitaria, dijo Lehane.
Dicha información ayudaría a “impulsar el desarrollo de la IA”, dijo la empresa, y podría “ser especialmente importante si las cambiantes normas sobre derechos de autor restringen el acceso de las empresas estadounidenses a los datos de entrenamiento.”
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