Bloomberg — Los republicanos están elaborando a puerta cerrada un proyecto de ley fiscal que incluye un aumento de la deducción fiscal estatal y local hasta US$25.000 para un individuo, según personas familiarizadas con el plan.
Un aumento considerable del actual límite de US$10.000 en las deducciones SALT representaría una importante victoria política para un grupo crucial de republicanos de la Cámara de Representantes de distritos indecisos que representan el área de la ciudad de Nueva York y el sur de California, que han condicionado sus votos a favor de un proyecto de ley de recorte fiscal más amplio a que se garantice una deducción mayor.
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El plan, que aún está en proceso de redacción y no es definitivo, también incluye una renovación de las reducciones de impuestos de 2017 del presidente Donald Trump para particulares y empresas de capital cerrado, así como algunas de sus promesas fiscales de campaña, dijeron las personas, que solicitaron el anonimato para hablar de asuntos privados.
Los republicanos están considerando compensar el aumento del tope SALT reduciendo las deducciones que las corporaciones pueden reclamar sobre los impuestos estatales y locales que pagan, dijeron las personas.
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El presidente aún no ha sido informado de esta propuesta, pero el borrador representa un avance en el principal punto de la agenda legislativa para los republicanos. El partido aspira a aprobar la legislación a más tardar en agosto, ya que los legisladores se apresuran a proporcionar un contrapeso a los posibles daños económicos y la caída del mercado derivados de las políticas arancelarias de la Casa Blanca.
Ayudantes de la administración Trump y el equipo del presidente de Finanzas del Senado, Mike Crapo, están tomando la iniciativa en la redacción del plan, dijeron las personas.
Crapo ha advertido que “hasta que no se redacte el proyecto de ley, todo está sobre la mesa y nada está sobre la mesa”.
La Casa Blanca y el Departamento del Tesoro no respondieron inmediatamente a las solicitudes de comentarios.
Durante la campaña electoral, Trump prometió eliminar los impuestos sobre los ingresos por propinas, el pago de horas extras y las prestaciones de la Seguridad Social. El plan tratará de cumplir al menos dos de esas promesas, según las personas familiarizadas.
Si los republicanos acaban incluyendo la idea de Trump sobre la Seguridad Social, limitarán las reducciones fiscales para que sólo se apliquen a los ingresos inferiores a un determinado umbral, dijeron las personas. Las normas del Senado también limitan las reducciones fiscales relacionadas con los gravámenes sobre las nóminas, por lo que los republicanos podrían tener que desarrollar una solución para las personas mayores que no elimine directamente los impuestos sobre la renta en los cheques de prestaciones.
La idea de Trump de no aplicar impuestos a las propinas es la política más desarrollada, dijeron las personas.
El Senado todavía está negociando una resolución que dictará el tamaño global de los recortes fiscales y cualquier reducción de gastos en el proyecto de ley final. Ambas cámaras del Congreso tendrán que aprobar versiones idénticas de esa medida antes de que puedan comenzar las negociaciones oficiales sobre los recortes fiscales.
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El personal de Crapo y los ayudantes de la administración están compilando ahora un borrador del proyecto de ley fiscal para que los republicanos estén en gran medida en la misma página después de que el Congreso apruebe la resolución presupuestaria. El Senado tiene previsto votar el presupuesto, que también incluirá un aumento del techo de la deuda, en los próximos días, y la Cámara le seguirá la semana que viene.
La propuesta también hará retroceder partes de la Ley de Reducción de la Inflación, firmada por el presidente Joe Biden, como medio para compensar algunos de los recortes.
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