Bloomberg — El presidente Donald Trump ha pedido la resurrección de la construcción naval estadounidense para buques comerciales y militares en un discurso en el Capitolio, una medida destinada a contrarrestar el dominio chino de la industria.
“Anuncio esta noche que crearemos una nueva oficina de construcción naval en la Casa Blanca y ofreceremos incentivos fiscales especiales para traer esta industria a casa, a Estados Unidos, donde pertenece”, dijo en un discurso el martes por la noche. “Solíamos fabricar tantos barcos que ya no los fabricamos tanto”.
Lea más: Aranceles contra México, Canadá y China entran en vigor; Pekín anuncia tarifas de represalia
China cuenta con el mayor sector de construcción naval del mundo, ya que produce más de la mitad de los buques mercantes de todo el mundo, mientras que la industria estadounidense ha ido en declive.
La nación asiática se ha fijado como objetivo dominar el sector marítimo, ganando cuota de mercado con un “efecto dramático”, según afirmó el mes pasado la Oficina del Representante de Comercio de EE.UU. en un plan en el que proponía tasas sobre los buques mercantes chinos.
The Wall Street Journal informó anteriormente de que la administración Trump estaba preparando medidas para impulsar la construcción naval estadounidense, incluyendo la recaudación de ingresos a través de tasas a los buques y grúas construidos en China que entren en EE.UU.
Los observadores de la industria se han mostrado escépticos sobre la capacidad de Estados Unidos para reactivar rápidamente su sector de la construcción naval, citando los elevados costes de la mano de obra y de las materias primas.
En los últimos años, la industria china ha competido con las empresas japonesas y surcoreanas para erigirse como líder tanto en precio como en conocimientos industriales.
Vea más: Los inversores creen que respuesta de China fue moderada: las acciones reducen sus caídas
Por otra parte, Trump dijo que su administración “reclamará” el Canal de Panamá, un conducto marítimo mundial clave que permite a los barcos navegar del océano Atlántico al Pacífico. Un consorcio liderado por BlackRock (BLK) ha acordado comprar a un conglomerado con sede en Hong Kong el control de puertos clave cercanos a la vía navegable.
Lea más en Bloomberg.com
