La ONU advierte: el mundo incumple su promesa de dejar los combustibles fósiles

Esa es la conclusión de un nuevo informe del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), que advierte que las temperaturas globales pronto superarán el umbral de 1,5° C respecto a los niveles preindustriales.

PUBLICIDAD
La ONU advierte: el mundo incumple su promesa de dejar los combustibles fósiles
Por John Ainger
04 de noviembre, 2025 | 04:08 PM

Bloomberg — En la cumbre climática COP28 celebrada en Dubái hace dos años, los países alcanzaron un acuerdo sin precedentes para transformar sus economías y alejarse de los combustibles fósiles.

Sin embargo, ninguno de los cerca de 60 países que ha presentado una actualización de sus compromisos climáticos desde entonces ha fijado metas para reducir la producción de petróleo y gas ni eliminar los subsidios ineficientes a los combustibles fósiles.

PUBLICIDAD

Ver más: La Unión Europea intenta cerrar su plan para reducir un 90% las emisiones antes de la COP30

Esa es la conclusión de un nuevo informe del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), que advierte que las temperaturas globales pronto superarán el umbral de 1,5° C respecto a los niveles preindustriales, infringiendo el objetivo clave del Acuerdo de París. Es la señal más reciente de que el mundo avanza con lentitud en reducir la contaminación por gases de efecto invernadero y aún rehúye enfrentar la raíz del problema: las emisiones derivadas de los combustibles fósiles.

“Esto es algo que debemos denunciar”, dijo Teresa Ribera, vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea, en una entrevista en São Paulo. “Nos comprometimos a transitar fuera de los combustibles fósiles y, por supuesto, sabíamos que no sería algo que se resolviera de un año a otro, pero no podemos olvidar ese compromiso”.

PUBLICIDAD

El informe del PNUMA muestra la magnitud del desafío que enfrentan los líderes apenas dos días antes de llegar a Belém, en Brasil, para inaugurar la cumbre climática COP30 de las Naciones Unidas. Cómo aplicar la promesa de abandonar el petróleo, el gas y el carbón —en un contexto de creciente demanda energética y bajo presión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para aumentar la producción— será un tema central.

Incluso Brasil, anfitrión de la cumbre, ha otorgado aprobación a su estatal Petrobras para explorar petróleo en la desembocadura del río Amazonas.

“Estamos tan cerca de lo inevitable como se puede estar antes de sobrepasar 1,5° C”, dijo Anne Olhoff, asesora principal de clima del PNUMA, en una entrevista. “Necesitamos volver al tablero de diseño”.

Ver más: Brasil impulsará en la COP30 un pacto global por los combustibles limpios

Si bien limitar el calentamiento global a 1,5° C para 2100 sigue siendo “técnicamente posible”, los caminos para lograrlo implican que las temperaturas primero excedan ese umbral y luego se reduzcan mediante recortes más agresivos de emisiones y una mayor extracción de dióxido de carbono del aire, según el informe. Cada aumento adicional de 0,1° C incrementa el riesgo de activar puntos de inflexión y cambios climáticos irreversibles.

Menos de un tercio de los países ha presentado su plan climático actualizado ante la ONU a tiempo, y aun si todas las promesas se implementaran plenamente, las temperaturas subirían entre 2,3° C y 2,5° C, una mejora respecto a la proyección del año pasado de 2,6° C a 2,8° C.

La mayor parte de esa mejora se debe a nuevas políticas y compromisos actualizados, mientras que una parte menor se explica por ajustes metodológicos, según el PNUMA. Pero alrededor de 0,1° C del calentamiento evitado se compensará con la decisión de Trump de retirar a Estados Unidos del Acuerdo de París.

Incluso un escenario de “mitigación rápida desde 2025” supone que el mundo superará el objetivo de 1,5° C en 0,3° C antes de volver a ese nivel para 2100. Aun así, las proyecciones actuales representan una mejora significativa respecto a cuando se firmó el Acuerdo de París hace una década, cuando se esperaba un aumento de hasta 3,5° C.

“Estas proyecciones destacan el potencial de reducir el calentamiento de manera significativa mediante una acción inmediata de mitigación”, señala el informe. “Sin embargo, también subrayan la incómoda verdad de que sobrepasar 1,5° C está cada vez más cerca, y que el riesgo de niveles aún más altos de calentamiento aumenta rápidamente”.

Ver más: Brasil y la COP30: seis claves que podrían determinar el éxito o el fracaso de la cumbre

Si la COP30 responde de manera efectiva a la gran brecha entre la meta de 1,5° C del Acuerdo de París y las proyecciones actuales será uno de los principales barómetros del éxito de la cumbre. El resultado sigue siendo incierto y es probable que los bloqueadores tradicionales de la acción climática, como Arabia Saudita, se sientan envalentonados por la retirada de Trump del acuerdo y por un contexto geopolítico dominado por temas distintos al clima, como el comercio.

Menos de un tercio de los nuevos compromisos climáticos incluyen una meta de reducción del carbón, mientras que el 62% establece objetivos para disminuir el uso de combustibles fósiles en la generación eléctrica.

El brazo climático de la ONU, la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), publicó la semana pasada su evaluación de los compromisos actualizados, conocidos como Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC). El informe mostró que, aunque se espera que las emisiones de gases de efecto invernadero caigan cerca de 10% para 2035, aún están muy lejos del recorte de 60% que los científicos consideran necesario.

Implementar solo las políticas actuales llevaría a un aumento hasta 2,8° C, frente a los 3,1° C del año pasado, según el PNUMA.

“Ese es el gran elefante en la habitación: la suma de todas las NDC y la evaluación de la brecha”, dijo Laurence Tubiana, uno de los principales artífices del Acuerdo de París. “Tenemos que responder a eso”.

Lea más en Bloomberg.com

PUBLICIDAD