Bloomberg — Exxon Mobil Corp. (XOM) y Chevron Corp. (CVX) registraron resultados mejores de lo esperado luego de que la producción récord de petróleo amortiguara el impacto de los precios más bajos del crudo.
Exxon extrajo más petróleo que en cualquier segundo trimestre desde la histórica adquisición de Mobil hace más de 25 años. Mientras tanto, Chevron también elevó su producción a un máximo histórico de casi 4 millones de barriles diarios. Las acciones de ambas compañías subieron.
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Los aumentos de producción alimentados por el auge de la producción en la Cuenca Pérmica y en otros lugares permitieron a los titanes del sector energético estadounidense superar las expectativas de Wall Street incluso cuando los precios del petróleo cayeron y las perspectivas de la demanda se oscurecieron.
A raíz de la sorpresa de las ganancias, Exxon está atenta a más adquisiciones solo 16 meses después de su adquisición de Pioneer Natural Resources Co. por US$60.000 millones, dijo el CEO Darren Woods durante una conferencia telefónica con los medios.
Exxon está interesada en generar valor mediante fusiones corporativas que permitan alcanzar la ecuación de uno más uno, más de tres, dijo Woods. “Francamente, creo que aún existen oportunidades para nosotros. Estamos trabajando para ver si podemos materializar algunas de ellas”.
El trimestre estuvo marcado por fuertes oscilaciones en los precios del petróleo, ya que la guerra comercial del presidente estadounidense Donald Trump y los aumentos de producción de la OPEP+ confundieron las perspectivas de oferta y demanda.
Los precios internacionales del crudo bajaron casi US$20 por barril durante el período interanual, lo que obligó a varios productores estadounidenses a reducir el crecimiento de la producción, especialmente en la Cuenca Pérmica. Sin embargo, Exxon no ve motivos para detener su crecimiento en el sector del gas de esquisto estadounidense.
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La producción mundial de petróleo y gas natural de Exxon alcanzó el equivalente a 4,63 millones de barriles por día, mientras que Chevron aumentó su producción más de un 3% a 3,396 millones.
Los resultados se conocieron apenas dos semanas después de que Chevron derrotara un recurso de arbitraje interpuesto por Exxon, que retrasó durante más de un año la adquisición de Hess Corp. por US$53.000 millones. Las grandes petroleras estadounidenses se unieron a Shell Plc (SHEL) para superar las expectativas.
La ganancia ajustada de Exxon en el segundo trimestre, de US$1,64 por acción, superó en 8 centavos la previsión media. La compañía mantuvo la recompra de acciones en US$20.000 millones anuales, según un comunicado emitido el viernes, lo que tranquilizó a los inversores, cada vez más preocupados por la capacidad de las grandes petroleras para mantener la rentabilidad de sus accionistas ante la debilidad de los precios de las materias primas.
En cuanto a Chevron, su beneficio ajustado de 1,77 dólares por acción fue 6 centavos superior a la previsión media. Si bien la perforadora redujo las recompras de acciones para el período en un tercio, la compañía afirmó que sigue en camino de cumplir su objetivo anual con hasta US$15.000 millones en recompras.
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A pesar de los resultados positivos, Chevron ve el potencial de precios del petróleo más bajos a finales de este año a medida que el aumento de la oferta de la OPEP y sus aliados satura los mercados mundiales de crudo.
“Con esta dinámica, probablemente veamos cierta presión sobre los precios en la segunda mitad del año”, declaró el director financiero, Eimear Bonner, en una entrevista. “Estamos preparados para cualquier escenario de precios, así que si vemos una moderación, si es que realmente se materializa, estamos en una buena posición”.
Exxon ha recortado US$13.500 millones en costes anuales en los últimos seis años, cifra que, según afirma, supera a la de todos sus grandes rivales petroleros juntos. La compañía ha vendido activos, recortado empleos y centralizado funciones internas como la ingeniería. Espera reducir los gastos anuales en otros US$4.500 millones para 2030.
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Los resultados de Chevron podrían impulsar aún más una acción que tuvo un rendimiento inferior al de las grandes petroleras durante los últimos tres años. Su CEO, Mike Wirth, está impulsando importantes proyectos nuevos en el Golfo de México y Kazajistán, mientras se encuentra en transición hacia un modelo de mayor rentabilidad en la Cuenca Pérmica.
Chevron elevó su estimación de crecimiento del flujo de caja libre en un 25% a 12.500 millones de dólares para el próximo año si el petróleo se mantiene alrededor de los 70 dólares por barril.
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