Bloomberg — Una nave estelar de SpaceX explotó en un banco de pruebas en Texas, un contratiempo más para las ambiciones de Elon Musk de operar viajes de ida y vuelta a Marte.
La enorme explosión envolvió la nave cuando se encontraba en posición vertical en la Base Estelar, antes de que enormes columnas de llamas y humo se extendieran hacia el cielo nocturno, según mostraron las imágenes de video del incidente a última hora del miércoles. El incidente hizo temblar las ventanas y sacudió la vajilla, según informaron los medios de comunicación locales.
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Al parecer, el cohete estaba siendo sometido a una “prueba de fuego estático” rutinaria de sus motores. Una prueba de fuego estático es un procedimiento previo al lanzamiento en el que se encienden los motores de un cohete mientras éste permanece bien sujeto en la plataforma de lanzamiento, esencialmente un ensayo para el lanzamiento real, que permite a los ingenieros probar los sistemas del cohete sin enviarlo realmente al espacio.
En un comunicado, SpaceX dijo que el Starship “experimentó una anomalía importante” durante los preparativos para una 10ª prueba de vuelo. Nadie resultó herido y los residentes locales no corren peligro, dijo la compañía.
La magnitud del incidente no quedó clara de inmediato. Pero se suma a una serie de contratiempos para un programa de naves espaciales que es fundamental para los planes de la NASA de volver a poner las botas estadounidenses en la Luna, y también para las ambiciones más grandes de Musk de enviar carga y personas a Marte.
SpaceX tiene contratos con la NASA por valor de unos US$4.000 millones para alunizar a los astronautas de la agencia utilizando la Starship.
El mes pasado, la colosal Starship de SpaceX se desintegró en pleno vuelo tras perder propulsante y girar fuera de control. Esa pérdida supuso su tercer contratiempo consecutivo después de que los vuelos de enero y marzo se vieran interrumpidos a los pocos minutos de despegar cuando la nave espacial explotó sobre el Golfo de México, haciendo llover escombros desde el cielo e interrumpiendo el transporte aéreo.
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Como el sistema de lanzamiento más grande y potente del mundo, la Starship está destinada a servir como nave espacial principal para transportar personas a Marte y luego traerlas de vuelta a la Tierra. Musk ha dicho que planea enviar un cohete Starship al Planeta Rojo transportando robots construidos por Tesla Inc. (TSLA) ya en 2026.
A medida que Musk, la persona más rica del mundo, se aleja de su labor política en Washington para volver a centrarse en su imperio empresarial, quedan algunas preguntas sobre cuánto tiempo dedicará a Starship y SpaceX, y qué cambios hará dentro de la empresa para volver a encarrilar el programa.
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