Bloomberg — El intento de Elon Musk ante los tribunales de impedir que Sam Altman reestructure OpenAI será acelerado para que se celebre un juicio prontamente este año, según ha declarado una jueza.
La jueza de distrito estadounidense Yvonne González Rogers denegó el martes la petición de Musk de una orden judicial que pausaría inmediatamente la transformación del fabricante de ChatGPT de una empresa sin ánimo de lucro a una empresa con ánimo de lucro más convencional y de beneficio público mientras se desarrolla la demanda de Musk contra la startup.
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Pero Rogers escribió en su orden que quiere resolver rápidamente las demandas de Musk. Dado “el interés público en juego y el potencial de daño si se produjera una conversión contraria a la ley”, dijo Rogers, ella celebrará un juicio acelerado únicamente sobre la demanda “central” de que el plan de conversión de OpenAI es ilegal y “potencialmente las demandas interrelacionadas basadas en contratos.”
El momento es significativo porque OpenAI ya está en conversaciones para conseguir la aprobación de su conversión por parte de las autoridades de Delaware y California, un proceso que se prevé complejo.
“Nos complace que el tribunal haya ofrecido un juicio acelerado sobre las demandas principales que impulsan este caso, que en sus palabras presentan cuestiones ‘urgentes’ en interés del público”, dijo Marc Toberoff, abogado de Musk, en un correo electrónico. “Tenemos la intención de aceptar la oferta del tribunal”.
El fallo del martes se produce poco después de que OpenAI rechazara una oferta de adquisición no solicitada de US$97.400 millones de la persona más rica del mundo. Altman calificó la propuesta de intento de frenar a la empresa en su competencia con la propia startup de Musk, xAI.
OpenAI saludó la decisión del juez de rechazar una orden judicial.
“Esto siempre ha sido sobre la competencia”, dijo la compañía en un comunicado. “Los propios correos electrónicos de Elon muestran que quería fusionar una OpenAI con ánimo de lucro con Tesla (TSLA). Eso habría sido genial para su beneficio personal, pero no para nuestra misión o los intereses de EE.UU.”.
En la lucha judicial que inició el año pasado, Musk ha acusado a OpenAI de incumplir las promesas que le hizo cuando él y Altman trabajaron juntos para lanzar la empresa en 2015. Afirma que la startup abandonó su propósito fundacional como organización benéfica cuando aceptó miles de millones de dólares en respaldo de Microsoft Corp. (MSFT) a partir de 2019, el año después de que él abandonara el consejo de OpenAI.
Rogers había dicho en una audiencia el 4 de febrero en Oakland, California, que no estaba inclinada a emitir una orden judicial en un caso que enfrenta a “multimillonarios contra multimillonarios”. Pero cuando dijo que probablemente dejaría que Musk llevara a OpenAI a juicio, los abogados le dijeron que lo más pronto que podría celebrarse un juicio sería a finales de 2026 o 2027.
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La inversión de US$13.000 millones de Microsoft en OpenAI ha suscitado la preocupación de la Comisión Federal de Comercio de EE.UU. por la posibilidad de que el gigante tecnológico extienda su dominio en la computación en nube al floreciente mercado de la IA. Sin embargo, la empresa de inversión japonesa SoftBank Group Corp. está en conversaciones para invertir decenas de miles de millones de dólares en OpenAI, un movimiento que eclipsaría potencialmente todas las demás participaciones y la convertiría en el mayor patrocinador de la startup.
OpenAI está actualmente en conversaciones con inversores para conseguir una valoración de US$300.000 millones, según ha informado Bloomberg.
El caso es Musk contra Altman, 4:24-cv-04722, Tribunal de Distrito de EE.UU., Distrito Norte de California (Oakland).
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