Bloomberg — Unilever Plc (UL) retrasó su escisión de Magnum Ice Cream Co. debido al cierre del gobierno en EE.UU., aunque espera completar la escisión este año.
La Comisión del Mercado de Valores de EE.UU. no puede declarar efectiva la declaración de registro estadounidense necesaria para que las acciones de la compañía de helados sean admitidas a cotización en la Bolsa de Nueva York, según informó el martes la empresa anglo-holandesa de bienes de consumo.
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El último cierre del gobierno estadounidense, el tercero bajo el mandato del presidente Donald Trump, comenzó el 1 de octubre cuando el Congreso no logró aprobar una medida de financiación provisional, lo que desencadenó el primer cierre del gobierno del país en casi siete años.
Las acciones de Unilever cayeron hasta un 1% en las primeras operaciones en Londres. Las acciones han subido casi un 2% desde principios de año.
Unilever lleva trabajando en la escisión de su división de helados desde el año pasado, en su intento de renovar su negocio y reactivar su lento crecimiento. El rendimiento de la unidad ha sido irregular en los últimos años, en parte debido a la naturaleza altamente estacional del helado. Los elevados costes de producción y almacenamiento, así como la subida de los precios del cacao, también han lastrado sus márgenes y Unilever decidió que la unidad funcionaría mejor como negocio independiente.
La escisión estaba previamente encarrilada para mediados de noviembre, con una cotización primaria en los Países Bajos y secundarias en Londres y Nueva York.
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Dirigida por Peter ter Kulve, Magnum Ice Cream ha estado optimizando su cadena de suministro y creando un equipo de ventas en todo el mundo para preparar la escisión. Las ventas han empezado a mejorar recientemente, incluso en EE.UU., que es el mayor mercado para las marcas de helados, que incluyen las marcas Ben & Jerry’s, Breyers y Magnum.
Estaba previsto que las acciones de la unidad de helados cotizaran en Ámsterdam, Nueva York y Londres el 10 de noviembre. Unilever mantendrá alrededor del 20% del capital social de Magnum tras la escisión durante un máximo de cinco años.
Con la colaboración de Charlotte Hughes-Morgan.
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