Bloomberg — Las ventas de Burberry cayeron menos de lo esperado, ya que la marca de moda británica demostró su capacidad de recuperación con un cambio de rumbo bajo la dirección del CEO Joshua Schulman.
Las ventas en tiendas comparables se redujeron un 1% en el trimestre finalizado en junio, dijo Burberry Group Plc en un comunicado el viernes. Los analistas habían esperado una caída del 3,7%.
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Las ventas en América registraron el mayor crecimiento regional, con un aumento del 4% frente al 0,8% que esperaban los analistas.
La empresa afirmó que aún se encuentra en las primeras fases de su plan de cambio de rumbo y que el entorno macroeconómico sigue siendo incierto.
Schulman, que asumió el cargo de CEO hace un año, quiere devolver a la marca conocida por sus estampados tartán a sus raíces británicas, y promocionar mejor los productos de ropa exterior de Burberry, como bufandas y gabardinas.
El cambio de rumbo se produce en un momento en que Burberry y el sector se enfrentan a un mayor declive de la demanda de artículos de lujo desde los años del boom posterior a la pandemia.
Como parte de su revisión, Schulman dijo en mayo que Burberry recortaría alrededor de una quinta parte de su plantilla en un intento de reducir costos, y que las reducciones afectarían sobre todo a los puestos de las oficinas del Reino Unido, así como a los puestos de venta al por menor en todo el mundo.
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Las acciones de Burberry han ganado un 27% en lo que va de año hasta el cierre del jueves.
Schulman también está intentando recuperar el atractivo de Burberry entre los llamados consumidores aspiracionales, al tiempo que revierte el impulso de la anterior dirección hacia los bolsos caros, una estrategia que fracasó entre los clientes.
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