Bloomberg — Novartis AG obtuvo la aprobación regulatoria para el primer medicamento diseñado para bebés con malaria, el último avance en la lucha mundial contra esta enfermedad transmitida por mosquitos.
La farmacéutica suiza anunció el martes que la agencia suiza, Swissmedic, aprobó una nueva formulación de su medicamento Coartem para el tratamiento de bebés con un peso de entre 2 y menos de 5 kilogramos (11 libras). La compañía espera la aprobación de ocho países africanos y planea implementar el tratamiento principalmente sin fines de lucro, según indicó.
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Por ahora, los bebés con paludismo solían tratarse, por lo general, con tabletas destinadas a niños mayores, adaptadas a su peso, según la compañía.
El fármaco, también conocido como Riamet Baby en ciertos países, se desarrolló con el apoyo científico y financiero de Medicines for Malaria Venture, una organización suiza sin ánimo de lucro dedicada a los medicamentos antipalúdicos.
Según el último informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2023 se produjeron 263 millones de casos de paludismo en el mundo y 597.000 muertes, la mayoría de ellas en países africanos, y tres de cada cuatro fallecimientos correspondieron a niños menores de 5 años.
Novartis está desarrollando otros tratamientos antipalúdicos, entre ellos un compuesto para combatir la resistencia a los fármacos, actualmente en fase avanzada de ensayo, y otro que es una posible cura de dosis única.
La aprobación ofrece una luz después de que los profundos recortes a la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID) a principios de este año suscitaran preocupación sobre la lucha contra la malaria.
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Un estudio publicado a principios de este mes advertía de que los recortes a dicha agencia podrían provocar más de 14 millones de muertes en 2030 por diferentes causas, entre ellas la malaria y el VIH/SIDA.
Mientras tanto, los países de África Oriental están impulsando el gasto sanitario para ayudar a llenar el vacío dejado por la retirada de la agencia. Kenia, la mayor economía de la región, tiene previsto destinar unos US$130 millones a una asociación internacional que lucha contra el VIH/SIDA, la malaria y la tuberculosis.
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