La compañía también está sentando las bases para aumentar el ritmo de fabricación de nuevo en abril y una vez más a finales de 2026, dijeron las personas, que pidieron no ser identificadas al discutir asuntos confidenciales.
Tras alcanzar máximos históricos en la apertura, los principales índices de EE.UU. perdieron impulso hacia el cierre, arrastrados por la toma de ganancias en tecnológicas y la incertidumbre que genera un shutdown federal sin resolución a la vista.
Los analistas estiman que el cargo contable no monetario podría oscilar entre los US$2.500 y los US$4.000 millones, aunque Boeing no ha detallado el alcance del costo.
El proyecto, aún en fase temprana, incluye conversaciones con fabricantes de motores como Rolls-Royce, en un momento en que la seguridad del 737 sigue bajo escrutinio.
La diplomacia aeronáutica ha ocupado un lugar destacado en la presidencia de Trump, con transacciones en las que ha participado Boeing anunciadas junto con sus visitas a dignatarios extranjeros.
El fabricante de aviones criticó la maniobra sindical y sus condiciones contractuales revisadas, que se hicieron sin contar con la opinión de la dirección.
Aunque los vuelos de prueba no han revelado nuevos problemas técnicos en el avión o en los motores, todavía queda una “montaña de trabajo” antes de que el avión esté certificado, dijo el CEO Kelly Ortberg.
La oferta de contrato a cinco años aumenta los salarios en un 45% en promedio, según Boeing. Los miembros del Distrito 837 de IAM votarán sobre el contrato el viernes, según se informó.
La empresa planea empezar a publicar vacantes para algunos de los puestos de fabricación ocupados por los miembros del sindicato en huelga y celebrar una feria de empleo el 16 de septiembre.