El banco prevé un crecimiento del 2,4% en EE. UU. en 2026, pero advierte sobre retornos más bajos en renta variable por factores estructurales y coyunturales.
Los títulos llegaron a tocar mínimos de siete meses en París, golpeados por demoras en entregas y fallos técnicos en el A320, en un momento clave para cumplir con los objetivos anuales.
El repunte en los bonos japoneses desencadenó una ola de ventas en activos de riesgo, frenando el avance de Wall Street. El S&P 500 cedió y el bitcoin siguió cayendo.
Invesco ajusta su portafolio hacia activos ligados al crecimiento global. La estrategia favorece materias primas, REITs, préstamos bancarios y acciones en Japón y Europa.
El banco proyecta un crecimiento moderado y señala que el próximo gobierno deberá actuar con rapidez para evitar un deterioro fiscal mayor, en un entorno de presiones inflacionarias y política monetaria restrictiva.
El giro en la expectativa de tasas impulsó al indicador al final de noviembre. Albemarle, Eli Lilly y Akamai destacaron entre las mayores ganadoras del mes.
Wall Street cerró con ganancias moderadas en una jornada atípica por fallas técnicas en CME y bajo volumen tras Acción de Gracias. La expectativa de recortes de tasas por parte de la Fed impulsó los índices.
La escasa actividad por la baja liquidez en Estados Unidos limita los movimientos en los mercados globales. En España, Repsol y ArcelorMittal repuntan por noticias corporativas.
Los mercados emergentes se perfilan como destino clave para los inversionistas globales, con HSBC recomendando sobreponderación en renta variable asiática y bonos locales.
Las valoraciones de América Latina continúan por debajo de sus promedios históricos pese al avance de 2025. La brecha con otros mercados revela descuentos para quien quiera aprovecharlos.
Las utilidades superaron ampliamente las proyecciones del consenso y el Ebitda mostró un crecimiento agregado del 3,8%, impulsando una revisión al alza del panorama de ganancias para 2026.
El feriado en Wall Street por el Día de Acción de Gracias limitó la actividad y dejó sin brújula a los inversores europeos, mientras el Ibex se apoyó en noticias empresariales.
Los analistas advierten que los datos actuales no reflejan señales de euforia descontrolada ni exceso de valoración en los mercados de inteligencia artificial
