Wall Street repuntó gracias al impulso de gigantes tecnológicos y el optimismo por un posible alivio en las tensiones comerciales con Beijing, en una jornada marcada por resultados corporativos y sanciones energéticas.
La más reciente Encuesta de Opinión Financiera revela que los analistas esperan que el Banco de la República mantenga su tasa de intervención en 9,25% durante el resto del año.
El Brent cotizaba cerca de los US$62 por barril tras caer un 2,2% en las dos sesiones anteriores, mientras que el West Texas Intermediate se acercaba a los US$59.
La corrección reciente del peso colombiano no responde a cambios estructurales, sino a distorsiones temporales por la estrategia de deuda del Gobierno. La oportunidad de comprar dólar barato estaría llegando a su fin.
Mientras el Brent y el WTI retroceden por temores de sobreoferta, los grandes bancos ajustan sus previsiones: se esperan precios más bajos, superávits persistentes y una demanda presionada por el débil crecimiento global.
Las acciones pierden impulso ante dudas sobre la sostenibilidad del rally y señales de sobrevaloración en el S&P 500. El petróleo sube a máximos de tres semanas.
Los inversores evitan grandes movimientos antes del esperado recorte de tasas de la Reserva Federal, mientras persiste la incertidumbre sobre el tono que adoptará Jerome Powell.
Los futuros del crudo brent perdían US$0,41, o 0,6%, a US$68,06, mientras que los futuros del crudo West Texas Intermediate perdían US$0,37, también alrededor de 0,6%, a US$64,15 el barril.
La caída del WTI y el aumento de inventarios refuerzan la presión bajista sobre el mercado, mientras UBS, Goldman Sachs y Citi discrepan sobre el rumbo del Brent ante una posible sobreoferta global.
El informe detalla ajustes clave en los precios esperados para oro, petróleo y café, en un entorno de volatilidad global, nuevas tarifas y debilidad cíclica.
Las cuatro grandes petroleras estatales de América Latina enfrentaron un trimestre de precios más bajos, pero defendieron márgenes con más producción, eficiencia y diversificación en gas y refinación.
El dividendo total de la empresa en el trimestre fue de US$21.360 millones, casi sin cambios respecto al nivel del primer trimestre, pero inferior a los US$31.000 millones del año anterior.
El grupo petrolero acordó en principio elevar en septiembre su oferta diaria en 548.000 barriles, completando así la reversión de los recortes implementados en 2023.
El banco de inversión sobrepondera la acción y mantuvo el precio objetivo para los próximos doce meses. Los tres escenarios que proyecta para la empresa