La apelación pone a prueba un fallo del Tribunal Supremo de 1935 que decía que el Congreso podía aislar al menos a algunos altos funcionarios de ser despedidos.
Trump dijo que EE.UU. apelaría al alto tribunal en busca de alivio tan pronto como el miércoles porque “sería una devastación para nuestro país” si se dejaba en pie el fallo del tribunal de apelaciones.
El enfrentamiento también podría trastocar los distritos legislativos estatales y locales, lo que podría tener un impacto devastador en las elecciones en todos los niveles del sistema estadounidense.
Hace dos semanas, Moraes ordenó a Bolsonaro usar un grillete electrónico e impuso restricciones adicionales al uso de las redes sociales, alegando obstrucción a la justicia y riesgo de fuga.
La decisión, dictada por el juez del Tribunal Supremo Alexandre de Moraes a última hora del miércoles, restablece la mayor parte del llamado impuesto IOF.
El martes, al acceder a la solicitud de Trump a pesar de un voto en contra, los jueces autorizaron a la administración a implementar la orden ejecutiva de Trump del 11 de febrero.
La solicitud presentada el martes busca poner el caso en una vía acelerada con la posibilidad de un fallo definitivo del Tribunal Supremo para finales de año.
La decisión permite a DOGE tener acceso a la información personal identificable en la base de datos de la Administración del Seguro Social mientras el caso se tramita en apelación.