La declaración forma parte de un llamamiento más amplio para que las instituciones multilaterales mundiales promuevan resoluciones pacíficas a los conflictos militares en curso en Medio Oriente, África y Europa.
Es probable que la retirada genere rápidas críticas por parte de los gobiernos occidentales, que han instado a Teherán a permitir la reanudación de las visitas del OIEA.
En Dubái, parte de los EAU y a menudo considerado como el centro financiero y de negocios de Medio Oriente, la actividad del sector privado no petrolero se deterioró.
Durante una llamada, Macron instó de nuevo a Putin a aceptar un alto el fuego y a entablar una negociación seria, según una persona familiarizada con el asunto.
Trump dijo el miércoles que EE.UU. e Irán hablarían la próxima semana y que “quizá” firmarían un acuerdo. Teherán ha negado que esté previsto reanudar las conversaciones.
Irán no tiene “actualmente” la intención de recibir en Teherán al director general del Organismo Internacional de la Energía Atómica, Rafael Grossi, dijo.