Citi anticipa que los precios del uranio seguirán al alza hasta 2026, impulsados por la expansión de la capacidad nuclear en China, las políticas de Donald Trump en EE.UU. y cuellos de botella en la oferta global.
Sus declaraciones se producen después de que la agencia de noticias iraní Fars informara que el presidente Masoud Pezeshkian sufrió heridas leves en una pierna en un ataque israelí el 16 de junio.
Un informe de la Agencia de Inteligencia de Defensa del Pentágono dijo que los bombardeos probablemente no paralizaron los componentes centrales del programa iraní bajo tierra.
El presidente estadounidense, Donald Trump, dijo que los ataques aéreos habían “borrado” el trío de objetivos, y amenazó con más acciones militares si Irán no hacía las paces.
Los operadores prevén una caída de las acciones y un repunte de los precios del crudo y del oro, ya que el bombardeo aviva la demanda de seguridad y la angustia por el suministro energético.
El vicepresidente estadounidense aseguró tras el ataque a Irán que “la manera de lograr paz es a través de la fuerza”. Dijo que permitirlo “llevaría a un conflicto militar absolutamente desastroso”.
Yaakov Amidror, exasesor israelí de seguridad nacional del primer ministro Benjamin Netanyahu, señaló: sin Estados Unidos, Israel hallará una solución creativa para destruir Fordow.
El impulso alcista en esta materia prima se aceleró desde el jueves de la semana pasada, cuando empezó el conflicto en Medio Oriente entre Israel e Irán.
Los ataques aéreos de Israel dañaron el programa nuclear iraní pero probablemente no llegaron a eliminarlo, según los expertos, lo que plantea al primer ministro Benjamin Netanyahu y a EE.UU. un dilema sobre qué hacer a continuación.
Las cuatro primeras rondas de conversaciones, con la mediación de Omán, han ido bien en líneas generales, según funcionarios estadounidenses e iraníes.
Se espera que los 10 últimos reactores cuesten un total de 200.000 millones de yuanes (US$27.000 millones), según el medio de comunicación local The Paper.
Estados Unidos e Irán completan una nueva ronda de negociaciones nucleares en Mascate, con señales de progreso y el levantamiento de sanciones como eje clave del diálogo.
Aunque Irán y EE.UU. también calificaron de constructiva la primera ronda de conversaciones, posteriormente se enfrentaron en torno a sus respectivas demandas y a los límites de un posible acuerdo,
Trump manifestó que su preferencia era una conversación cara a cara con Irán, y que consideraba que hacer eso podría ayudar a hacer más fácil el acuerdo.
La revelación se produce en un momento en que el presidente estadounidense ha aumentado la presión sobre Teherán, incluso mediante ataques acelerados contra los rebeldes hutíes.