Bloomberg Línea — El ministro de Relaciones Exteriores de Israel, Gideon Sa’ar, confirmó que seis ciudadanos murieron en la entrada de Jerusalén este lunes, 8 de septiembre, tras un tiroteo presuntamente perpetrado por palestinos.
“Dos terroristas palestinos asesinaron a judíos que viajaban en autobuses en el cruce de Ramot, a la entrada de Jerusalén”, sostuvo Sa’ar, durante una visita a Hungría. “Hasta el momento, seis israelíes han muerto. Hay muchísimos heridos, incluida una mujer embarazada; oramos por ellos”.
Ver más: Israel establece una “zona humanitaria” mientras se amplía la ofensiva en Gaza
Tras lo sucedido, el ministro pidió a Europa y la comunidad internacional tomar partido en el conflicto que se libra en Medio Oriente: “Deben tomar una decisión clara: ¿Están del lado de Israel? ¿O del lado de los yihadistas?”.
Previo al pronunciamiento del canciller, el servicio de emergencias israelí Magen David Adom hizo un balance de la situación. Además de los fallecidos, reportó siete heridos graves, dos moderados y tres leves.
Tras lo sucedido y luego de una evaluación adelantada con las fuerzas de seguridad israelíes, el primer ministro del país, Benjamin Netanyahu, sostuvo: “Ahora estamos persiguiendo y rodeando los pueblos de los que proceden los asesinos. Atraparemos a todos los que les ayudaron, a todos los que les enviaron, y tomaremos medidas aún más duras”.
El cruce de Ramot, donde se produjo el ataque, está situado en tierras de Cisjordania que Israel designa como parte de la jurisdicción municipal de Jerusalén.
Israel tomó este terreno en la Guerra de los Seis Días de 1967. Quienes abogan por un Estado palestino quieren que esa tierra se entregue a los palestinos o se cambie por otra, explica la periodista Alisa Odenheimer de Bloomberg.
Después del ataque, Hamás emitió en un comunicado en el que se lee: “Afirmamos que esta operación es una respuesta natural a los crímenes de la ocupación y a la guerra de exterminio que se está llevando a cabo contra nuestro pueblo”.
Entretanto, el ministro de Defensa israelí, Israel Katz, reaccionó al atentado vaticinando consecuencias “extremadamente graves” contra sus perpetradores.
“Me entristece el atroz asesinato de seis civiles inocentes a manos de malhechores en el ataque terrorista de esta mañana en Jerusalén”, escribió en X. “Este atroz ataque tendrá consecuencias extremadamente graves y de gran alcance. Perseguiremos el terrorismo en todas partes”.
El pasado domingo, antes del atentado terrorista en Jerusalén, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que Hamás tiene que aceptar sus condiciones para poner fin a su guerra con Israel. Y lanzó un ultimátum.
“He advertido a Hamás sobre las consecuencias de no aceptar”, escribió el mandatario estadounidense en Truth Social. “Esta es mi última advertencia, ¡no habrá otra!”.
Ver más: Israel autoriza expansión de los asentamientos disputados en Cisjordania
