Armada venezolana se aproxima al buque de Exxon Mobil frente a la costa de Guyana

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo esta semana que planea revocar la licencia petrolera de Chevron Corp. para operar en Venezuela

oil tanker
Por Denis Chabrol
01 de marzo, 2025 | 06:18 PM

Bloomberg — El buque patrullero venezolano que entró en aguas de Guyana el sábado y se posicionó cerca de una embarcación contratada por Exxon Mobil Corp. en el bloque petrolífero de Stabroek, ha abandonado la zona, según la Fuerza de Defensa de Guyana.

Stabroek, el yacimiento petrolífero más importante del mundo con un crecimiento más rápido y con unos 11.000 millones de barriles de recursos recuperables, se encuentra en aguas parcialmente reclamadas por Venezuela. En 2023, el presidente venezolano Nicolás Maduro avivó la tensión al solicitar un referéndum para reclamar una gran parte de Guyana.

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“El buque sigue en nuestras aguas”, dijo el brigadier Omar Khan, jefe de la Fuerza de Defensa de Guyana, y añadió que «todo indica que se dirige hacia Venezuela”.

El Departamento de Estado de EE. UU. calificó la amenaza de Venezuela de inaceptable. “Cualquier provocación adicional tendrá consecuencias para el régimen de Maduro”, dijo el 10 de enero la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento, sin dar más detalles.

El presidente de Guyana, Irfaan Ali, dijo que el barco patrullero armado transmitió un mensaje de radio informando a la embarcación que estaba operando en aguas internacionales en disputa antes de continuar su curso hacia otras embarcaciones en el área.

“Durante esta incursión, el barco venezolano se acercó a varios activos en nuestras aguas exclusivas, incluyendo el FPSO Prosperity”, dijo Ali, refiriéndose a una de las embarcaciones contratadas por Exxon.

Exxon descubrió Stabroek en 2015. La disputa territorial, que se remonta a más de un siglo, estalló cuando Maduro trató de galvanizar a sus partidarios para las elecciones presidenciales del año pasado, en las que se atribuyó la victoria en lo que los observadores llamaron un voto robado. Exxon no respondió de inmediato a las solicitudes de comentarios.

Delcy Rodríguez, vicepresidenta de Venezuela, arremetió contra Ali, llamándolo “el Zelensky caribeño” en referencia al presidente ucraniano Volodymyr Zelensky. Rodríguez dijo en un comunicado que las aguas no forman parte de Guyana, sino que son “una zona marítima pendiente de delimitación de conformidad con el derecho internacional”.

Khan dijo que la Fuerza de Defensa de Guyana está monitoreando el curso de la embarcación. Anteriormente desplegó aviones sobre el área y envió una embarcación de la Guardia Costera al área.

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Ali dijo a Bloomberg News que había informado a los legisladores y estaba informando a los socios internacionales de Guyana, incluido Estados Unidos.

La Organización de los Estados Americanos “condena de manera inequívoca las recientes acciones de los buques de la Armada venezolana” que amenazan a las unidades de producción operadas por Exxon en aguas de Guyana, declaró la OEA en un comunicado.

“Tales actos de intimidación constituyen una clara violación del derecho internacional, socavan la estabilidad regional y amenazan los principios de coexistencia pacífica entre naciones”, según la OEA.

Ali dijo que el embajador de Venezuela en Guyana ha sido convocado a una reunión y que Guyana enviará una protesta formal al gobierno venezolano.

El bloque petrolero de Stabroek produce 650.000 barriles al día. También es la sede de un importante descubrimiento de gas en Longtail, con una producción estimada de entre 1000 y 1200 millones de pies cúbicos diarios.

En 2023, el gobierno de Guyana provocó a Maduro al decir que otorgaría nuevos bloques petroleros para fin de año. El gobierno de Maduro dijo que algunos de esos bloques están en aguas que no han sido delimitadas, o que pertenecen a Venezuela, reavivando la disputa fronteriza.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo esta semana que planea revocar la licencia petrolera de Chevron Corp. para operar en Venezuela, amenazando con torpedear la lenta recuperación económica de la nación.

“El desarrollo de Venezuela no depende de los estadounidenses”, dijo Maduro el jueves, sin referirse a Chevron directamente. “No nos arrodillamos ante nadie”.

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