Bloomberg — Brasil planea utilizar un fondo social que recibe regalías por la exploración de petróleo y gas para ayudar a impulsar la economía, mientras las encuestas de opinión muestran que la popularidad del presidente Luiz Inácio Lula da Silva está cayendo a mínimos históricos.
Una medida provisional publicada el jueves por la noche instala un comité para administrar el fondo social que fue creado en 2010 para invertir parte de los ingresos de la exploración petrolera del presal de Brasil en educación. El comité, que decidirá el destino de los cerca de 20.000 millones de reales (US$3.500 millones) que el fondo ha acumulado desde entonces, puede utilizar el dinero para fines presupuestarios generales o transferirlo a otros fondos, según un funcionario del Ministerio de Hacienda.
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Si bien cualquier uso de ese dinero seguirá contando como gasto primario y, por lo tanto, estará sujeto a las normas fiscales del país, llega en un momento oportuno para el gobierno, ya que la economía se está desacelerando, lo que probablemente reducirá los ingresos fiscales.
También podría utilizarse para reforzar otros programas sociales que podrían dar un impulso a la popularidad de Lula, que ha estado disminuyendo debido a un aumento en los precios de los alimentos y las crecientes preocupaciones sobre la criminalidad.
Sin embargo, el dinero no se gastará de inmediato, ya que el gobierno podría tardar hasta 60 días en regular el comité y recién entonces comenzará a discutir el destino de los fondos, dijo el funcionario. Eso significa que cualquier impacto en la economía podría sentirse recién en la segunda mitad del año.
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