Bloomberg Línea — Miguel Uribe Turbay, candidato presidencial y senador colombiano del opositor Centro Democrático, fue víctima de un atentado con varios disparos el sábado a las 5:30 pm, al occidente de Bogotá.
“Miguel está luchando por su vida”, dijo María Claudia Tarazona, esposa de Uribe Turbay, en un mensaje en la cuenta de X de su esposo. “Pidamos a Dios que guíe las manos de los doctores que están atendiéndolo. Les pido a todos unirnos en una cadena de oración por la vida de Miguel. Pongo mi fe en Dios”.
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Las autoridades no han confirmado los autores del atentado de Uribe Turbay, que es nieto del expresidente colombiano Julio César Turbay Ayala (1978-1982).
La Fundación Santa Fe dijo que a las 8:30 p.m. del sábado recibió, en el Instituto de Urgencias de la clínica, a Uribe Turbay, “quien ingresó en estado crítico y está siendo atendido de manera prioritaria por nuestro de equipo de especialistas. En este momento se encuentra en procedimiento neuroquirúrgico y vascular periférico”.
“Desde el momento de su llegada, se han activado todos los protocolos de atención de alta complejidad requeridos”, dijo la clínica en un comunicado. “Nuestro equipo asistencial y los recursos técnicos de la institución están plenamente dispuestos para brindar el tratamiento necesario con el mayor compromiso, rigurosidad y humanidad.
El director de la Policía colombiana, Carlos Triana, dijo que Uribe Turbay se encontraba con un concejal de la ciudad y veinte personas más al momento de la agresión. También dijo que uno de los presuntos agresores fue capturado, luego de quedar herido en una de sus piernas.
“En la reacción policial, un hombre de protección reacciona y aprehende a uno de los agresores, que es menor de edad”, dijo Triana. “Igualmente (hubo) dos lesionados, un hombre y una mujer, fue incautada un arma de fuego tipo Glock, que se encuentra en cadena de custodia”.
Reacción de las autoridades
“Todos sabemos que hay una distancia política entre la familia Uribe Turbay y el gobierno, pero es distancia política y la política es libre, y siempre hemos defendido que sea libre de violencia, por eso hicimos la paz”, dijo el presidente colombiano Gustavo Petro en una alocución presidencial cerca de la medianoche.
Poco después del atentado, la Presidencia de Colombia expresó su rechazo “de manera categórica y contundente” al hecho criminal. “Este acto de violencia es un ataque no solo contra la integridad personal del senador, sino también contra la democracia, la libertad de pensamiento y el ejercicio legítimo de la política en Colombia”.
El secretario de Salud de Bogotá, Gustavo Quintero, dijo al noticiero independiente Noticias Uno que Uribe Turbay fue trasladado a la clínica Santa Fe, que puede atender a pacientes de alta complejidad.
“Dispusimos un equipo y un operativo de movilidad para que pueda llegar cuanto antes”, dijo Quintero al noticiero, a las afueras de la clínica. “Eso es lo más importante de todo. La salud de Miguel es lo primordial. El mensaje principal esta noche es toda la solidaridad con Miguel, y a todas las personas en Bogotá, demostremos que, ante estos hechos violentos, Bogotá reacciona en paz”.
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El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, había dicho más temprano que Uribe Turbay fue atendido de urgencia y que toda la red hospitalaria de Bogotá estaba en alerta en caso de requerir un traslado.
El Gobierno de Colombia, que preside Gustavo Petro, canceló el viaje internacional que tenía previsto a Francia con varios de sus ministros en las horas de la noche.
“La gravedad de los hechos y el compromiso del Gobierno Nacional con la defensa de la institucionalidad y la protección de todos los actores democráticos del país exigen la presencia inmediata del Jefe de Estado y de su equipo de gobierno en el territorio nacional”, dijo el Ejecutivo en un comunicado.
El Gobierno también llamó a las autoridades competentes “para que adelanten de manera inmediata y rigurosa las investigaciones necesarias que conduzcan a identificar y judicializar a los responsables de este atentado”.
Según un comunicado del partido opositor Centro Democrático, el atentado contra Uribe Turbay ocurrió en un parque de la localidad de Fontibón, cuando sujetos armados le dispararon por la espalda “mientras participaba en un evento de campaña”.
Pedro Sánchez, el ministro de Defensa, ordenó a las Fuerzas Militares, a la Policía Nacional y a los organismos de inteligencia “desplegar todas sus capacidades para aclarar con urgencia los hechos”.
La sombra de la violencia política
Uribe Turbay es hijo de Diana Turbay, una periodista que fue secuestrada en 1990 por el capo del extinto cártel de Medellín, Pablo Escobar Gaviria. En 1991, Diana Turbay murió cuando la policía intentaba rescatarla en un operativo cerca de Copacabana, un poblado de Antioquia vecino de Medellín.
La Defensoría del Pueblo colombiana repudió el acto violento y dijo que, “hechos como este constituyen una grave amenaza a los derechos políticos, a la libertad de expresión y a la vida misma, pilares esenciales de toda sociedad democrática. El país no puede permitir que resurjan épocas oscuras en las que la violencia pretendía silenciar ideas, candidaturas o liderazgos políticos”.
El secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio dijo, en un mensaje de X, que su país condena el intento de asesinato “y que era el resultado de una violenta retórica de izquierda proveniente de los más altos niveles del gobierno de Colombia”.
“Luego de ser testigo de primera mano del progreso de Colombia en las últimas décadas para consolidar su seguridad y democracia, no podemos permitirnos volver a los oscuros días de la violencia política”, agregó. “El presidente Petro debe reducir su retórica incendiaria y proteger a los funcionarios colombianos”.
Varios candidatos presidenciales se solidarizaron con Uribe Turbay, condenaron el intento de homicidio y expresaron su temor porque Colombia vuelva a los años ochenta y noventa, cuando la guerrilla de las FARC y los cárteles del narcotráfico asesinaron a candidatos presidenciales de izquierda y derecha, como Jaime Pardo Leal, Carlos Pizarro, Bernardo Jaramillo Ossa, Luis Carlos Galán, y Álvaro Gómez Hurtado.