Bloomberg — Manifestantes en Ecuador lanzaron piedras contra la caravana que transportaba al presidente Daniel Noboa, enfadados por la decisión de su gobierno de poner fin a un subsidio al diesel el mes pasado. No resultó herido, pero el incidente inquietó a los inversores en bonos.
Según su oficina, el todoterreno negro dañado de Noboa también fue objeto de posibles disparos durante el incidente que tuvo lugar en la provincia de Cañar, al norte de Cuenca, la tercera ciudad más grande de Ecuador. La provincia ha sido un punto caliente de protestas desde que el líder de 37 años eliminó el subsidio al combustible que costaba alrededor de US$1.400 millones el año pasado.
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En un post en X, su oficina insistió desafiantemente en que el gobierno no cederá ante la presión y que Noboa seguirá viajando “a todos los rincones del país”. Está previsto que cinco detenidos comparezcan ante un tribunal de Cuenca este miércoles, informó la cadena de televisión Teleamazonas.
“El nivel de agresividad con que fue atacada la comitiva denota que se trató de un claro intento de magnicidio y de un acto de terrorismo”, dijo a Teleamazonas el ministro de Defensa, Gian Carlo Loffredo.
Ni la violencia ni el miedo detendrán el trabajo de #ElNuevoEcuador. 🇪🇨
— Presidencia Ecuador 🇪🇨 (@Presidencia_Ec) October 8, 2025
Durante su visita a Cañar, el presidente @DanielNoboaOk, junto a su caravana presidencial, fue objeto de ataques violentos mientras cumplía con su deber: entregar obras y llevar desarrollo a las comunidades.… pic.twitter.com/QNFeDpiMXF
Los bonos ecuatorianos en dólares, que tuvieron un buen comportamiento la semana pasada cuando Noboa parecía dispuesto a capear la última oleada de protestas, retrocedieron este miércoles ante la escalada. Los pagarés soberanos cayeron en toda la curva, y la deuda con vencimiento en 2040 bajó casi un centavo a US$64,5, el nivel más bajo desde finales de agosto, según los datos indicativos de precios recopilados por Bloomberg.
La organización paraguas indígena Conaie, voz principal de la protesta, negó durante la noche que el incidente constituyera un intento de asesinato. En cambio, culpó a Noboa de entrar en “una zona de resistencia” y de utilizar a las fuerzas armadas en lugar del diálogo para salir de la crisis.
“El Estado debe garantizar la seguridad del presidente sin exponer a los civiles ni utilizar los viajes oficiales como provocación política”, dijo la Conaie, pidiendo una investigación independiente. El grupo reconoció que algunas personas podrían enfrentarse a cargos, pero añadió que los detenidos fueron maltratados y dijo que “la justicia no se dicta a través de las redes sociales”.
Tanto Colombia como Perú condenaron el incidente.
El martes fue la segunda vez que Noboa sufre un ataque desde que la Conaie declaró una huelga nacional a finales del mes pasado para protestar por el fin del subsidio.
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Los disturbios han llevado a las empresas de la provincia norteña de Imbabura, también blanco de las protestas, a denunciar daños millonarios.
Gobiernos anteriores intentaron poner fin al subsidio al diesel tanto en 2019 como en 2022, desencadenando protestas aún mayores.
El pasado fin de semana, Noboa amplió el estado de emergencia a 10 de las 24 provincias de la nación andina, después de que el titular de la Conaie amenazara con llevar las protestas a la capital, Quito. También amplió el fin de semana largo a cuatro días a partir del 11 de octubre en un intento de enfriar las protestas.
La decisión de Noboa de poner fin al subsidio hizo que el precio del combustible industrial clave se disparara en más de la mitad. También estuvo acompañada de medidas sociales por valor de cerca de US$1.000 millones, incluida la promesa de congelar las tarifas de los autobuses.
Desde que se anunció la controvertida medida el 12 de septiembre, unos 110 manifestantes han sido detenidos, mientras que una persona murió por disparos, presuntamente de soldados. El ministro del Interior, John Reimberg, ha prometido una investigación independiente sobre el asesinato.
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