Bloomberg — El magnate mexicano Ricardo Salinas se está involucrando más en la política, anunciando una campaña organizativa para oponerse al gobierno de la presidenta izquierdista Claudia Sheinbaum, pidiendo a los ciudadanos que se unan a él para combatir el crimen y la corrupción.
Salinas, uno de los hombres más ricos de México, controla un conglomerado que maneja la minorista de productos electrónicos Elektra, además de importantes empresas bancarias y de radiodifusión.
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Lanzada en un video publicado en las redes sociales unas horas antes de la festividad del Día de la Independencia de México, el martes, la campaña de organización llega en un momento en el que el imperio empresarial del magnate ha sido acusado por las autoridades de no pagar sus impuestos.
La disputa de larga data involucra MXN$74.000 millones (US$4.000 millones) en impuestos supuestamente vencidos.
En su video, Salinas nunca menciona a Sheinbaum por su nombre mientras describe su movimiento como uno que promueve la vida, la propiedad privada y la libertad.
La oficina de Sheinbaum no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
“Nuestro México está en manos de un gobierno conformado por gente peligrosa, tienen una ideología realmente perversa, son comunistas”, dijo Salinas, rodeado por su esposa, una bandera mexicana y una imagen de la Virgen de Guadalupe. Y agregó: “¡Mexicanos, ya basta de este régimen criminal y corrupto!”.
Salinas dijo que pronto lanzará un sitio web donde mexicanos con ideas afines podrán inscribirse, aunque no detalló qué actividades perseguirá el esfuerzo o si busca formar un partido político. Señaló que los miembros se comprometerán a “no robar, no matar y no mentir”.
Anteriormente ha dicho que es demasiado pronto para decidir si se presentará a las elecciones presidenciales. La próxima votación presidencial en México aún está lejos, fijada para 2030.
Un representante de Grupo Salinas no respondió a una solicitud de comentarios.
Salinas ha negado repetidamente que sus empresas tengan facturas fiscales morosas, mientras que Sheinbaum ha utilizado en ocasiones su conferencia de prensa diaria para presionar a Salinas, argumentando que todos deben pagar lo que deben.
El poder judicial de México, recientemente elegido y defendido por Sheinbaum, es el encargado de revisar las reclamaciones fiscales. En julio, el presidente de la Suprema Corte dijo a Bloomberg que los casos fiscales deben ser claros, sin abordar directamente los casos que involucran a las empresas de Salinas.
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