Ciudad de México — Walmart de México (WALMEX*), una cadena de tiendas de autoservicio, analiza los efectos de una eventual imposición de aranceles para mantener sus precios atractivos en el mercado ante cualquier circunstancia del entorno económico o político.
El director de Administración y Finanzas de la compañía, Paulo García, dijo en un webcast con analistas que realizan una llamada todos los días con su matriz estadounidense y con Walmart Canadá sobre aranceles.
“Estamos entendiendo por parte de Estados Unidos cuál es ese impacto, por parte de Canadá cuál es ese impacto, algunas de las lecciones que pueden aplicarse al mercado de México en esas circunstancias”, comentó el directivo.
Ver más: Cofece sanciona a Walmart de México con USD$5 millones
García afirmó que la compañía está preparada y están siendo proactivos para entender sus importaciones y precios.
El 3 de febrero, Trump acordó pausar por un mes la imposición de aranceles de 25% a México y Canadá, sus países vecinos y socios comerciales en el T-MEC. Previo al acuerdo, tanto la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, como el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, contemplaban responder con medidas arancelarias y no arancelarias.
Desde su llegada al poder, Trump ha impuesto aranceles de 10% a las importaciones provenientes de China y tarifas del 25% a todas las importaciones de acero y aluminio, éstas últimas entrarán en vigor el 12 de marzo.
El mandatario también ordenó a su administración el 13 de febrero considerar la imposición de aranceles recíprocos a varios socios comerciales, aunque sin una fecha para entrar en vigor.
Ver más: Pilgrims apuesta a la inquietud de México por la inflación ante posible guerra arancelaria
La posibilidad de aranceles por parte de la economía más grande del mundo ha generado incertidumbre y ha llevado a que diversas empresas consideren las medidas que podrían adoptar para mitigar el impacto de las tarifas en sus negocios.
Analistas y economistas consideran poco probable que las amenazas de imponer aranceles a las mercancías provenientes de México se materialicen, pero de suceder estiman un impacto a la actividad económica e incluso una recesión en el país.