Bloomberg — Uno de los analistas más bajistas de Wall Street para Tesla Inc (TSLA) redujo aún más las estimaciones para las ganancias de la compañía, citando la magnitud de la reacción de los compradores de automóviles contra Elon Musk.
Las entregas de vehículos de Tesla en el primer trimestre estuvieron muy por debajo incluso de la estimación pesimista del analista de JPMorgan Chase & Co. Ryan Brinkman, “confirmando el daño sin precedentes a la marca que habíamos temido anteriormente”, dijo en un informe este viernes.
El informe de ventas “nos hace pensar que -en todo caso- puede que hayamos subestimado el grado de reacción de los consumidores”, escribió Brinkman.
Las acciones de Tesla cayeron más de un 5% antes del inicio de las operaciones regulares de este viernes. Las acciones se han desplomado un 44% desde que alcanzaron un máximo histórico el 17 de diciembre.
Durante los tres primeros meses del año, Tesla entregó 336.681 vehículos, su peor total trimestral desde 2022. Además de cambiar las líneas de producción en cada una de sus plantas de montaje para construir el rediseñado Modelo Y, el fabricante de automóviles estaba lidiando con Musk, su CEO, convertido en una figura más polarizante debido a sus intervenciones en la política mundial.
Ver más: Acciones de Tesla suben por la esperanza de que Musk vuelva a centrarse en su empresa
JPMorgan espera ahora que los beneficios de Tesla en el primer trimestre se sitúen en 36 céntimos por acción, por debajo de su proyección anterior de 40 céntimos y de la estimación media de los analistas de 46 céntimos.
Brinkman también recortó su proyección para todo el año a US$2,30 por acción. Los analistas encuestados por Bloomberg estiman de media que la empresa ganará 2,70 dólares por acción, y Brinkman señala que esta cifra ha caído un 17% desde la última vez que Tesla comunicó sus beneficios trimestrales a finales de enero.
Se espera que Musk se retire de su papel al frente de la iniciativa conocida como Departamento de Eficiencia Gubernamental una vez que concluya su periodo de 130 días como asesor temporal del presidente Donald Trump, según informó Bloomberg el jueves.
Pero el multimillonario seguirá ejerciendo una influencia significativa sobre el esfuerzo federal de reducción de costes y seguirá siendo un confidente de Trump después de su salida formal, según personas familiarizadas con el asunto.
El CEO de Tesla es un empleado especial del gobierno, una clasificación para los contratados federales temporales que solo deben trabajar 130 días al año en sus funciones. No se ha fijado una fecha formal para la salida de Musk, y la oficina legal de la Casa Blanca está a cargo de determinar cuándo Musk ha trabajado sus 130 días, dijeron las personas.
Ver más: Tesla registra su peor trimestre de ventas desde 2022: reacción contra Musk pasa factura
Tras emerger como el mayor contribuyente de Trump en las elecciones presidenciales de EE.UU., Musk puso sus miras en Europa a principios de este año, atacando a figuras políticas más convencionales y alineándose con partidos y activistas de extrema derecha. A Tesla le ha salido el tiro por la culata: las ventas se desplomaron un 62% el trimestre pasado en Alemania, donde se encuentra la única planta de ensamblaje de vehículos de la empresa en el continente.
Lea más en Bloomberg.com
