El oro alcanzó nuevos máximos históricos y superó la barrera psicológica de los US$3.000 por onza, en un movimiento que, si bien fue esperado, se dio de manera ordenada y sin grandes sobresaltos. De acuerdo con el banco de inversión suizo UBS, esta tendencia refleja la anticipación del mercado ante factores como la debilidad del dólar, el aumento de las tensiones comerciales y la incertidumbre geopolítica persistente.
“Es poco probable que los participantes del mercado se sorprendan por la continua subida del oro, dada la creciente tensión comercial, las preocupaciones sobre el crecimiento económico y los riesgos geopolíticos persistentes”, sostiene el informe de UBS, que añade: “La debilidad del dólar también ha sido un factor de apoyo”.
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La tendencia alcista del oro
Los analistas de UBS destacaron que siguen “optimistas con el oro” y que ven riesgos al alza en sus proyecciones.
“Un nuevo avance podría verse amplificado por condiciones de liquidez reducida”, especificaron y advirtieron que la perspectiva subyacente para el oro sigue siendo firmemente alcista y que el posicionamiento en el mercado aún es moderado.
Según UBS, a medida que el oro sigue marcando nuevos máximos, la razón para añadir posiciones en el metal se vuelve cada vez más relevante. “En nuestra opinión, el mayor valor de entrar en posiciones de oro en este momento radica en su comparación con otros activos dentro de una cartera”, explicaron.
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Teniendo en cuenta esta línea de análisis, UBS proyecta que el interés de los inversores continúe desde la perspectiva de utilizar el oro como cobertura, ante un panorama macroeconómico y/o geopolítico mucho más adverso, o en caso de que se materialicen otros riesgos extremos.
ETF de oro y el papel de China
Uno de los factores clave en la escalada del oro ha sido la mayor demanda de los fondos cotizados (ETF). UBS señala que los flujos de entrada en estos instrumentos han sido constantes, con un aumento neto de más de 3 millones de onzas en febrero, la mayor alza mensual desde 2020. A pesar de ello, las tenencias globales de ETF de oro aún están por debajo de sus máximos históricos, lo que sugiere espacio para una mayor expansión.
China ha sido un actor clave en esta tendencia, con un crecimiento del 15% en los ETF de oro en lo que va del año y un incremento del 190% desde su punto más bajo en 2023. No obstante, estos fondos representan solo el 4% del total global, lo que indica que su impacto sigue siendo limitado en comparación con otras regiones.
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El FOMO podría ayudar a la plata y al platino
El temor a quedarse fuera del mercado (FOMO, por sus siglas en inglés) probablemente aumente cuanto más tiempo se mantenga el oro por encima de US$3.000, indicaron desde UBS. Esto podría generar un mayor interés en los metales preciosos blancos, en particular la plata y el platino, ya que los inversores buscan formas alternativas de reflejar su visión alcista sobre el oro y realizar operaciones de ajuste.
