Bloomberg — Warren Buffett, que convirtió a Berkshire Hathaway Inc. en una empresa valorada en más de 1,16 billones de dólares y a sí mismo en una celebridad multimillonaria famosa por su perspicacia inversora y sus ocurrencias, dejará su cargo a finales de año tras seis décadas al frente del conglomerado.
Greg Abel, vicepresidente de operaciones no aseguradoras, se hará cargo del conglomerado tras la aprobación del consejo de administración, dijo Buffett, de 94 años, el sábado en la asamblea anual de accionistas de la compañía en Omaha, Nebraska. Dijo que la junta tiene previsto reunirse el domingo.
El anuncio dejó atónita a la junta e incluso a Abel, quien, aunque señalado desde hace tiempo como el sucesor de Buffett, desconocía que la noticia se iba a producir cuando la reunión anual se acercaba a su fin.
“Ese es el gancho informativo del día”, dijo Buffett. “Gracias por venir”.
Berkshire creció agresivamente durante décadas con Buffett como presidente y consejero delegado, mientras elegía adquisiciones y acciones para la cartera de la empresa junto a su asesor de confianza y vicepresidente, Charlie Munger, fallecido en 2023 a los 99 años. El conglomerado adquirió un desconcertante surtido de empresas, que Buffett decía a menudo que reflejaban la economía estadounidense en su conjunto. Una apuesta por Berkshire decía, era una apuesta por Estados Unidos.
“El mundo es la ostra de Berkshire - un mundo que nos ofrece una gama de oportunidades mucho más allá de las que están abiertas de forma realista a la mayoría de las empresas”, dijo Buffett en su carta anual publicada en 2015.
Buffett tenía el oído de otros consejeros delegados y de algunos presidentes, y era capaz de atraer a una multitud de decenas de miles de accionistas a Omaha cada año para la reunión anual.
Su éxito inversor, una ganancia anual compuesta del 20% en las acciones de Berkshire entre 1965 y 2024, en comparación con alrededor del 10% para el S&P 500, le dio el poder de mover las acciones y le ayudó a cerrar lucrativos acuerdos con Goldman Sachs Group Inc. y General Electric Co. en tiempos de crisis.
Buffett empezó a gestionar dinero cuando era joven, discípulo del estilo inversor de Benjamin Graham. Se adentró más en el mundo empresarial cuando su Buffett Partnership Ltd. compró acciones de Berkshire. En 1965, tomó el control del resto de la empresa.
Compuesta en su mayor parte por operaciones textiles en dificultades que acabarían desapareciendo, Berkshire se convirtió en la base del gigante moderno de Buffett. Pieza a pieza, fue construyendo y adquiriendo operaciones en un variado conjunto de industrias, incluidos los seguros - que le proporcionaron efectivo, o “float” - para ayudar a su estrategia de inversión.
Ahora, Berkshire posee empresas que van desde la ferroviaria BNSF hasta la aseguradora de automóviles Geico, pasando por extensas operaciones energéticas e incluso minoristas como Dairy Queen y See’s Candies. Su colección de empresas generó 47.400 millones de dólares de beneficios operativos anuales en 2024. Buffett también construyó la cartera de acciones -poblándola con apuestas gigantescas en empresas como Apple Inc. y American Express- y ofreciendo a Berkshire otra forma de participar en las ganancias de empresas que no poseía en su totalidad.
‘Apuesta All-In’
Cuando Buffett acordó comprar BNSF por 26.000 millones de dólares en 2009, calificó la operación de “apuesta total por el futuro económico de Estados Unidos”. El multimillonario rara vez perdía la oportunidad de ensalzar las perspectivas de la economía estadounidense.
Una “tendencia todopoderosa” hacia una mayor productividad hizo grande al país, escribió en una carta anual de 2015. A lo largo de su vida, la producción económica de la nación se había multiplicado por seis per cápita, “un salto mucho más allá de los sueños más descabellados de mis padres o de sus contemporáneos”, escribió.
Abel, de 62 años, adjunto de Buffett desde hace mucho tiempo, se hará cargo de un negocio saneado. Aunque Berkshire acaba de informar de que los beneficios de explotación del primer trimestre descendieron un 14%, hasta los 9.600 millones de dólares, tras las fuertes pérdidas en su unidad de seguros relacionadas con los incendios forestales de California, el aumento de sus tenencias de letras del Tesoro contribuyó a elevar los ingresos por inversiones.
Operaciones escasas
Durante la pandemia, Buffett se vio bloqueado en el frente de la negociación de acuerdos debido a las altas valoraciones de los buenos negocios, lo que dejó una pila de efectivo hinchada y pocas oportunidades atractivas para poner el dinero a trabajar. En lugar de tratos, Buffett se inclinó por la recompra de acciones para desplegar el capital, aunque rompió con esa tendencia al completar una adquisición de 11.600 millones de dólares de Alleghany Corp. en 2022.
El año pasado, lamentó la falta de acuerdos significativos que dieran a la empresa la oportunidad de obtener un “rendimiento asombroso”, mientras la pila de efectivo de Berkshire alcanzaba otro récord. Las pocas empresas estadounidenses capaces de mover la aguja en Berkshire ya habían sido “interminablemente elegidas por nosotros y por otros”, dijo.
Desde entonces, mientras el multimillonario recortaba sus participaciones en Apple y Bank of America Corp. al tiempo que se abstenía de realizar grandes operaciones, la pila de efectivo de Berkshire siguió acumulándose, hasta alcanzar los 347.700 millones de dólares a 31 de marzo.
También hubo algunos pasos en falso ocasionales. Buffett admitió que pagó demasiado por el fabricante de equipos aeroespaciales Precision Castparts, una operación que obligó a una amortización de 10.000 millones de dólares en 2020. Y Buffett y Munger fueron famosos por ver tarde el valor de las acciones tecnológicas, aunque más tarde aceleraron las compras de acciones de Apple.
Aún así, su trayectoria a largo plazo ha atraído a seguidores durante años. En las reuniones anuales celebradas en un abarrotado estadio deportivo de Omaha, él y Munger opinaban sobre temas que iban desde los mercados bursátiles hasta las criptodivisas e incluso la vida y el éxito. Tanto el evento anual, apodado Woodstock para capitalistas, como su carta anual, ampliamente leída, jugaban con la fascinación del inversor por enseñar a los demás.
Los seguidores del multimillonario suelen citar sus ocurrencias más memorables. Buffett volvió a sacar una de sus castañas en 2018 sobre la cuestión de si la atribulada Wells Fargo & Co. -entonces una inversión de Berkshire desde hacía mucho tiempo- podría descubrir más irregularidades: “Nunca hay una sola cucaracha en la cocina”. Y de las firmas financieras sobreapalancadas durante la crisis mundial de 2008 dijo lo siguiente: “Sólo te enteras de quién ha estado nadando desnudo cuando baja la marea”.
A pesar del gran número de seguidores de Buffett, su gestión diaria de Berkshire era sencilla. Durante mucho tiempo favoreció un enfoque de gestión descentralizado, permitiendo a los responsables de los distintos negocios de Berkshire dirigir las operaciones como considerasen oportuno y comprobando las operaciones de vez en cuando.
Buffett consideraba que uno de sus papeles más importantes era el de asignador de capital para Berkshire, averiguando adónde debía ir el dinero, y al parecer pasaba mucho tiempo leyendo en su oficina corporativa de Omaha. Esa oficina tenía sólo 27 empleados el año pasado.
“La decisión de Buffett de limitar sus actividades a unos pocos tipos y de prestarles la máxima atención, y de seguir haciéndolo así durante 50 años, fue un lollapalooza”, dijo Munger en una carta anual. “Buffett tuvo éxito por la misma razón que Roger Federer se hizo bueno en el tenis”.
Críticas a política arancelaria
El director ejecutivo de Berkshire Hathaway, Warren Buffett, abordó las políticas arancelarias del presidente estadounidense Donald Trump en la reunión anual de la compañía en Omaha, afirmando que el comercio “no debería ser un arma”.
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“Se pueden presentar muy buenos argumentos para afirmar que un comercio equilibrado beneficia al mundo”, declaró Buffett en respuesta a una pregunta sobre las barreras comerciales. “No cabe duda de que el comercio puede ser un acto de guerra”.
Añadió que Estados Unidos “debería buscar el comercio con el resto del mundo”.
El conglomerado comentó sobre los aranceles en su informe de resultados del primer trimestre, publicado antes de la reunión del sábado. Las ganancias operativas de Berkshire cayeron aproximadamente un 14 % respecto al año anterior, hasta los US$9.600 millones, mientras que su liquidez aumentó a US$347 700 millones, ante las dificultades de la compañía para invertirla.
En el comunicado, Berkshire advirtió que los aranceles podrían afectar negativamente a su amplia cartera de negocios. Los resultados de Berkshire se siguen de cerca porque el conjunto de negocios del conglomerado, que abarca desde seguros hasta ferrocarriles, energía y manufactura, ofrece una visión general de la salud de la economía estadounidense.
“Actualmente no podemos predecir con fiabilidad el impacto potencial en nuestros negocios, ya sea por cambios en los costos de los productos, los costos y la eficiencia de la cadena de suministro, o la demanda de nuestros productos y servicios por parte de los clientes. Es razonablemente posible que haya consecuencias adversas en la mayoría, si no en todos, nuestros negocios operativos”, así como en su cartera de valores.
Aunque Buffett afirmó el año pasado que no respaldaría a ningún candidato político, esto no le ha impedido hacer comentarios ambiguos en el pasado, como el de marzo, en el que calificó los aranceles como “un acto de guerra”.
Los anuncios de aranceles de Trump el dos de abril, con motivo del “Día de la Liberación”, convulsionaron los mercados de valores y el sector de la inversión. Se espera que los aranceles resulten en mayores costos de reparación para aseguradoras de automóviles como Geico, la empresa de Buffett.
Berkshire con US$347 mil millones de liquidez
Las ganancias operativas de Berkshire Hathaway Inc. cayeron cerca de un 14% respecto al año anterior y su pila de efectivo subió a un récord de 347.700 millones de dólares, mientras el conglomerado luchaba por poner dinero a trabajar en medio de la incertidumbre arancelaria.
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Las ganancias operativas de Berkshire, dirigida por el consejero delegado Warren Buffett, cayeron a 9.600 millones de dólares, según informó el conglomerado en un comunicado el sábado.
“Sigue existiendo una considerable incertidumbre sobre el resultado final de estos acontecimientos”, dijo Berkshire en el comunicado, refiriéndose a las políticas comerciales internacionales y a los aranceles.
Berkshire dijo que la mayoría de sus negocios generaron menores ingresos y ganancias en el primer trimestre. Para Cathy Seifert, analista de CFRA Research, esto puede ser una señal de que la economía en general se está suavizando.
“Lo que estamos viendo aquí es la exposición de Berkshire a la economía en general, que se está ralentizando”, dijo Seifert en una entrevista.
La empresa se negó a recomprar acciones propias por tercer trimestre consecutivo. Esto podría significar que el precio de las acciones está “demasiado valorado para el gusto de Berkshire”, dijo Seifert.
A finales de marzo, las cinco mayores participaciones de la empresa seguían siendo American Express Co, Apple Inc, Bank of America Corp, Coca-Cola Co y Chevron Corp.
Berkshire Hathaway fue un vendedor neto de 1.500 millones de dólares en valores de renta variable en el trimestre, según el comunicado.
Los ingresos por inversiones de la unidad de seguros aumentaron un 11%, hasta 2.900 millones de dólares, impulsados por un incremento del 31% en los intereses y otros ingresos por inversiones, ya que el conglomerado poseía más letras del Tesoro.
Geico, la aseguradora de automóviles de Berkshire, registró un aumento de los beneficios, ya que la unidad siguió incorporando más clientes. Los gastos también aumentaron, ya que la aseguradora está intentando ganar cuota de mercado.
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Los beneficios de suscripción de la unidad de seguros se redujeron casi a la mitad en el trimestre, en parte debido a unos 860 millones de dólares de pérdidas después de impuestos vinculadas a los incendios forestales de California.
El valor de mercado de Berkshire ha rondado por encima del billón de dólares desde finales de enero, alcanzando una relación precio/valor contable de 1,79 al cierre de las operaciones del viernes.
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