Bloomberg — Funcionarios estadounidenses y rusos se reunieron en Arabia Saudita durante aproximadamente 12 horas al día después de que los equipos estadounidense y ucranianos mantuvieran conversaciones, mientras el presidente Donald Trump presiona para lograr avances en el logro de un alto el fuego en la guerra.
Se esperaba que ambas partes emitieran un comunicado el martes. La delegación rusa seguía enfrascada en conversaciones a puerta cerrada con Estados Unidos en Riad, la capital saudí, a última hora del lunes, según informó la agencia de noticias rusa Tass. Está encabezada por el exviceministro de Asuntos Exteriores Grigory Karasin y Sergei Beseda, asesor del jefe del Servicio Federal de Seguridad en Moscú, según la agencia.
Las partes abordaron la seguridad de la navegación en el Mar Negro, según declaró el lunes a la prensa el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov. El presidente ruso, Vladímir Putin, será informado de inmediato del resultado de las conversaciones, añadió.
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Las conversaciones con Estados Unidos del domingo fueron “productivas y centradas” y “abordaron puntos clave, incluida la energía”, dijo el ministro de Defensa ucraniano, Rustem Umerov, en las redes sociales.
El asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Mike Waltz, declaró el domingo que las negociaciones con “equipos técnicos” se centrarían en un posible alto al fuego marítimo en el Mar Negro. Sugirió que esto daría lugar a conversaciones sobre “la línea de control, que es el frente real” de la guerra que comenzó cuando Rusia invadió Ucrania en febrero de 2022.
“Eso abarca los detalles de los mecanismos de verificación, el mantenimiento de la paz, la congelación de las líneas donde están”, dijo Waltz en el programa Face the Nation de CBS. “Y luego, por supuesto, la paz más amplia y permanente”, incluyendo garantías de seguridad para Ucrania.
Las conversaciones siguen a las llamadas telefónicas separadas de Trump la semana pasada con Putin y el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskiy, que llevaron a un acuerdo sobre un cese de 30 días de los ataques a la infraestructura energética.
Zelenskiy dijo el domingo que continuaban los “ataques masivos con drones rusos” y pidió a Estados Unidos y a sus aliados europeos que ejerzan “más presión sobre Rusia para detener este terrorismo”.
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El lunes, mientras se desarrollaban las conversaciones en Riad, un misil ruso impactó una zona densamente poblada en la ciudad de Sumy, en el noreste de Ucrania, hiriendo a casi 90 personas, incluidos 17 niños, dijo el presidente Volodymyr Zelenskiy en su discurso en video de la tarde.
Los niños se refugiaban en un refugio antiaéreo durante el ataque, lo que evitó más víctimas, según declaró el gobernador local, Volodymyr Artyukh, en un comunicado en video en Telegram. Varios edificios de apartamentos y una escuela resultaron dañados.
Por otra parte, el operador ferroviario estatal ucraniano, Ukrzaliznytsia, anunció en una publicación de Facebook el lunes que sufrió un ciberataque masivo que afectó a la mayoría de sus servicios en línea. El tráfico ferroviario se mantiene estable a pesar del ataque, indicó.
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