Bloomberg — España se opondrá a los planes de la OTAN de elevar el objetivo de gasto de defensa de sus miembros al 5% del PIB, lo que podría provocar un enfrentamiento con el presidente estadounidense, Donald Trump, que quiere que Europa gaste más en su propia seguridad.
El primer ministro español, Pedro Sánchez, dijo al secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, Mark Rutte, en una carta vista por Bloomberg que se opondría a la nueva propuesta de gasto, que la alianza busca cerrar en una cumbre la próxima semana.
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Los líderes de los 32 países miembros se reunirán la próxima semana en La Haya para comenzar a adaptar la alianza a los desafíos que plantea la invasión rusa de Ucrania y la amenaza de Trump de reducir la seguridad estadounidense en Europa. Washington ha estado impulsando un aumento sin precedentes del gasto en defensa, argumentando que los aliados europeos deben asumir la responsabilidad de su propia defensa.
“España no puede comprometerse con un objetivo de gasto específico en términos de PIB en esta cumbre”, declaró Sánchez en la carta, fechada el 19 de junio. “Para España, comprometerse con un objetivo del 5% no solo sería irrazonable, sino también contraproducente”.
Algunos países de la OTAN, en particular los que limitan con Rusia, coinciden en que es necesario un aumento del 5%. Sin embargo, otros, como España, Italia y Portugal, han expresado dudas sobre el objetivo y el calendario de entrega.
Si bien la propuesta inicial de Rutte era un objetivo del 5% para 2032, las negociaciones previas a la cumbre han considerado retrasarlo hasta 2035. Del objetivo total, el 1,5% podría destinarse a proyectos de seguridad más amplios en lugar de capacidades militares tradicionales.
En abril, Sánchez anunció que España aumentaría su gasto de defensa del 1,4% al 2% a finales de año, pero advirtió que no estaba dispuesto a ir más allá.
Sánchez enfrenta presiones políticas internas y la mayoría de los aliados políticos de su gobierno minoritario rechazan aumentar el gasto en defensa. Además, un escándalo de corrupción que involucra a dos de sus principales asesores ha generado dudas sobre la capacidad del gobierno para concluir su mandato, previsto para 2027.
“Tal nivel de gasto sería incompatible con nuestro estado de bienestar y nuestra visión del mundo”, escribió Sánchez. “Las intenciones son poderosas, pero rara vez prevalecen sobre la realidad empírica”.
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