Bloomberg — Altos funcionarios estadounidenses y ucranianos iniciaron conversaciones en Arabia Saudita sobre el camino hacia un posible acuerdo de paz con Moscú, horas después de que Rusia combatiera el mayor ataque con drones en su territorio en la guerra de tres años.
“Lo más importante es debatir cómo lograr una paz justa y duradera en Ucrania”, dijo a los periodistas el principal asesor del presidente ucraniano, Andriy Yermak, antes de la reunión del martes en la ciudad saudí de Yeddah. “Ucrania está dispuesta a trabajar para lograr ese objetivo”.
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Antes de las conversaciones con la delegación ucraniana, el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, dijo que estaba tratando de escuchar qué concesiones estaba dispuesta a hacer Ucrania para lograr un acuerdo con Rusia.
“Lo más importante que tenemos que dejar aquí es la sensación de que Ucrania está preparada para hacer cosas difíciles, como los rusos van a tener que hacer cosas difíciles para poner fin a este conflicto”, dijo Rubio. La reunión tiene como objetivo “establecer claramente sus intenciones”.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, envió a Rubio y al asesor de seguridad nacional, Mike Waltz, a reunirse con Yermak y los ministros de Defensa y Relaciones Exteriores de Ucrania, Rustem Umerov y Andrii Sybiha, después de que su administración suspendiera los suministros militares y la mayor parte de la asistencia de inteligencia en un cambio de política que sorprendió a Kiev y a sus aliados europeos.
Estados Unidos ha vinculado la restauración de la ayuda vital a Ucrania con una demostración de compromiso con una solución diplomática a la guerra que Rusia inició en febrero de 2022. El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskiy, cuyo enfrentamiento con Trump en la Oficina Oval el 28 de febrero provocó un desencuentro sin precedentes, ha respaldado un plan para detener temporalmente los ataques aéreos y marítimos propuesto por Francia y el Reino Unido.
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“Las garantías de seguridad son muy importantes”, dijo Yermak antes de las conversaciones, añadiendo que Ucrania busca asegurar “que esta agresión nunca se repita en el futuro”.
Rusia está dispuesta a aceptar una tregua para detener todos los combates a cambio de avances en los términos generales de un eventual acuerdo de paz, incluida una misión de mantenimiento de la paz, informó Bloomberg el 7 de marzo. El Kremlin ha rechazado la presencia de tropas de la OTAN después de que el Reino Unido y Francia se ofrecieran a contribuir con fuerzas a una “coalición de los dispuestos”.
En un esfuerzo por acelerar el cese del fuego en Ucrania, Trump enviará esta semana a un enviado a Moscú, Steve Witkoff, para reunirse con el presidente Vladimir Putin, según dijeron personas familiarizadas con el asunto. Aunque el título de Witkoff es enviado a Oriente Medio, este sería su segundo viaje a Rusia como representante de Trump, según las personas, que pidieron no ser identificadas porque se trata de deliberaciones privadas.
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Posibles concesiones
Antes de la reunión del martes, Rubio dijo que Estados Unidos buscaba “obtener una idea general de qué concesiones están dentro del ámbito de lo posible para ellos y qué necesitarían a cambio”. Dijo que Estados Unidos luego averiguaría la posición rusa para entender “cuán lejos estamos realmente”.
Es probable que Estados Unidos quiera que Ucrania deje de lado su intento de unirse a la Organización del Tratado del Atlántico Norte, acepte un estatus neutral efectivo y algunos límites a su ejército y armamento, dijo Cliff Kupchan, presidente de la consultora neoyorquina Eurasia Group. El control ruso de alrededor del 20% del territorio ucraniano que ha ocupado también tendría que ser parte de cualquier acuerdo, aunque sin ningún reconocimiento legal, dijo Kupchan.
Esto alimentaría las preocupaciones entre los aliados tradicionales de Estados Unidos en Europa de que Trump esté dispuesto a aceptar un acuerdo en los términos de Rusia mientras persigue su objetivo de normalizar los lazos con el Kremlin.
“Quieren que los ucranianos apoyen el cese del fuego que quiere Trump”, dijo Kupchan, ex alto funcionario del Departamento de Estado durante la presidencia de Bill Clinton. “Van a ejercer cierta presión para que Putin adopte la postura”.
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La semana pasada, Trump dijo que las negociaciones con Rusia eran “más fáciles” que con Ucrania. Su gobierno está esbozando cómo podría aliviar las sanciones impuestas a Rusia debido a la guerra, incluido un tope a los precios de sus ventas de petróleo, según personas familiarizadas con las discusiones.
Un posible acuerdo sobre recursos naturales con Ucrania —que Trump ha presentado como un prerrequisito para reparar los lazos con Kiev— no será el tema principal de discusión durante la reunión del martes, dijo Rubio a los periodistas camino a Jeddah el lunes.
Zelenskiy se reunió el lunes con el príncipe heredero saudí, Mohammed bin Salman, gobernante de facto del Reino, pero se fue antes de que comenzaran las conversaciones con Estados Unidos.
El ministro de Asuntos Exteriores saudí, el príncipe Faisal Bin Farhan, también estuvo en la mesa con las delegaciones de Estados Unidos y Ucrania el martes.
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Antes de las conversaciones en Yeddah, el Ministerio de Defensa ruso dijo que había derribado 337 vehículos aéreos no tripulados durante la noche, incluidos 91 sobre la región de la capital. También hubo ataques en otras nueve regiones, según un comunicado del ministerio publicado en Telegram, incluidos 126 drones derribados en la región de Kursk, que limita con Ucrania, donde las fuerzas del Kremlin están compitiendo para hacer retroceder a las tropas de Kiev y privarla de una moneda de cambio clave en las posibles negociaciones para un acuerdo.
Según la agencia de noticias Interfax, las primeras estimaciones indican que dos personas murieron y 18 resultaron heridas en la región de la capital. Rusia también disparó 126 drones y un misil balístico durante la noche contra objetivos en Ucrania, dijo la Fuerza Aérea de Kiev en un comunicado en Telegram.
El mes pasado, Rusia atacó la ciudad portuaria de Odesa, en el sur de Ucrania, en un ataque masivo con drones que dejó a 160.000 personas sin electricidad ni calefacción horas después de que los principales funcionarios de Moscú y Washington concluyeran las conversaciones. Ucrania no fue invitada a asistir a esas conversaciones en la capital saudí, lo que dejó a Zelenskiy preocupado de que la estrategia estadounidense no se alinee con los intereses de su país.
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